Tenéis entre manos un póker formado por las principales escuelas del Montsec
oriental, cuya fama va más allá de nuestras fronteras. Unas paredes vestidas de
un privilegiado calcáreo muy solicitado por todos, donde la saturación de
itinerarios confirma su enorme evolución en todas las facetas verticales. Desde
el más breve placer de movimientos, hasta la más embriagadora sensación de
estar horas y horas de cara a la pared, conviven en estos lugares próximos a la
comodidad del asfalto, factor clave de su éxito desde hace más de tres décadas
de escaladas.
Perteneciente al gran sistema orográfico del Prepirineo, la extensa Sierra del Montsec es uno de los macizos más característicos e individualizados del noreste peninsular. Su estructura viene determinada principalmente por la gran falla que dio origen en pasadas épocas geológicas, a los grandes murallones que forman la vertiente meridional, y que aún hoy en día constituyen uno de los más grandiosos y caóticos paisajes de nuestra montaña media. El topónimo “Montsec” parece sugerir una gran sequedad de ambiente, que no existe sino en la vertiente sur muy expuesta al sol y desprovista de arbolado. Más bien debe interpretarse que el sufijo “sec” se refiere a corte o tajo, en adecuada correspondencia con el aspecto topográfico de la montaña. Para el viajero que procedente del sur se dirige al pirineo leridano, es necesario entrar en la Conca de Tremp atravesando el Montsec, convergiendo todas las vías de comunicación en un congosto formado por los movimientos tectónicos que moldearon esta sierra, se trata del Pas de Terradets.
En este número monográfico trataremos de la escalada en el Montsec oriental
tomando como límites la Paret de les Bagasses al W y la Roca dels Arcs al E,
incluyendo la Roca Regina y el Peladet vinculado a Terradets. No cabe duda que
se trata de un repertorio considerable donde la mayor parte de sus itinerarios
merecen su espacio, por lo que prácticamente incluiremos la totalidad de ellos
para tener una visión exacta del terreno de juego. Si bien la época dorada de
estas famosas escuelas transcurrió entre los años 80 y 90, la magnitud del
fenómeno aún resuena entre sus paredes que representan una meca indispensable
para todo tipo de escaladores. Las dimensiones del escenario, la belleza del
entorno y la calidad del terreno, son y serán por mucho tiempo, los factores
decisivos del éxito cuyo futuro adivina una frecuentación constante pero sin
aglomeraciones. Si intentamos definir cada zona, tenemos una amplia mayoría de
grandes clásicas de grado medio en la Paret de les Bagasses, un repertorio más
selecto de aventura en la Roca Regina, las rutas en libre más modernas en el
Peladet, y todo un mosaico de alternativas a menor escala en la Roca dels Arcs.
Cuatro destinos totalmente divergentes, con todos los ingredientes necesarios
para quedar saturados de buen calcáreo sea cual sea la ruta escogida, y
casualmente cerca del vehículo, una gran ventaja que el resto de zonas del
Montsec no posee. En contra, estos lugares sintonizan irremediablemente con el
murmullo del asfalto, aunque el ritmo de la escalada pueda hacérnoslo olvidar
momentáneamente, sobre todo si el grado es acusado. Destacar que itinerarios asequibles
hay muy pocos. La escasez de fisuras y diedros deja al desnudo un predominio
total de la escalada exterior sobre placas y muros de buenas proporciones,
factor decisivo del porqué la trayectoria del Montse se retrasó con respecto al
de otras viejas escuelas exploradas con mucha más antelación. Además, su
situación geográfica sólo favoreció al contado grupo de escaladores de Lleida,
que por diferentes razones nunca de apresuró al evento dejando pista libre a
los aperturistas foráneos, principalmente de Barcelona. Desde entonces, las
cuatro dianas han sido víctimas de buena parte del colectivo catalán, con algunas
puntuales excepciones de escaladores madrileños, murcianos y franceses. Una
larga lista de apasionados que han hecho posible que en la actualidad el
espacio existente entre las vías sea muy limitado, aunque a estas alturas el término
“limitado” pueda sufrir alteraciones según la apreciación de cada uno. Por si
acaso, mejor no incitar a nadie, porque con lo que hay tenemos de sobra, y en estos
casos algo nuevo difícilmente aporta nada y solo estorba a las rutas ya
existentes.
En definitiva, esperemos que toda esta diversidad de itinerarios sirva para
entender un poco más de escalada, y lo más importante, repartir la atención
hacia otros objetivos tan o más interesantes para dar un respiro a los más
pulidos que ya son bastantes.
PARET DE LES BAGASSES
- Si las aguas de la Noguera Ribagorzana fueron capaces de moldear el
admirable congosto de Montrebei, la Noguera Pallaresa consiguió esculpir a su
paso el no menos monumental congosto de Terradets, vía de penetración natural a
la comarca del Pallars Jussà. Esta zona destaca por una amplia depresión a la
que el clima moderado, la vegetación y los cultivos le confieren un aspecto muy
mediterráneo. En el centro de la cuenca se encuentra Tremp, capital de la
comarca y centro de comunicaciones y servicios, cuya influencia traspasa los
límites comarcales. Tal es así, que el congosto de Terradets ha sido de siempre
un paso capital entre la Catalunya central y el pirineo, como lo demuestra el
viejo puente que sirvió en su tiempo a las caballerías y hoy a los escaladores,
para cruzar el cauce y llegar a la pared. La carretera y la línea del tren
rompen la solitud del desfiladero más transitado del Montsec, cuyas aguas son
un recurso natural y su aprovechamiento el motivo principal de su propia
fisonomía. Las características de la zona son todo un reclamo para la práctica
de la escalada, la espeleología y el excursionismo en general, siendo la Paret
de les Bagasses uno de los santuarios más visitados dentro del repertorio
nacional por sus largas rutas bien conocidas por todos. Su excepcional roca y
considerable desnivel, hacen de esta muralla un verdadero mosaico de
dificultades para todos los gustos y posibilidades, donde la mayoría de los
trazados apuestan por la escalada libre bien asegurada. En sus muros se
asentaron las pautas de lo que hoy conocemos como escalada deportiva, una
innovadora estrategia de equipar las vías reduciendo al máximo el riesgo de
caída, que a principios de los años 80 hizo furor a lo alto y ancho de esta
escuela leridana. El grado pre-fabricado garantizó una adicción directamente
proporcional a la venta de material, y al impulso comercial definitivo y su
desenfrenada evolución técnica. Esta nueva tendencia facilitó la tarea de
inaugurar itinerarios a destajo con un menor esfuerzo y experiencia, al margen
de los conceptos establecidos anteriormente. La comunión del grado con la
comodidad de acceso hizo que en poco tiempo el primer tercio de la pared quedara
saturado recelosamente de líneas de chapas y del rastro del magnesio que las
acompañaba. Fue la época dorada de la Paret de les Bagasses, con su punto
máximo de esplendor donde se pasó del estancado V+ al 6b obligado entre seguro
y seguro. "Chapa y sigue" sería el eslogan más acertado para definir
esa etapa con todo su entramado de ideas y apostolados al borde de la anarquía
vertical. Hoy por hoy, los pulidos cantos de esta gran palestra evidencian su
vasta frecuentación y recuerdan un episodio clave de la escalada española, en
el que se levantó el listón de la dificultad a marchas forzadas pero sin tener
en cuenta futuras repercusiones. De la perfecta combinación de la escalada
deportiva y la tradicional, han aparecido las figuras más relevantes capaces de
abrir sorprendentes rutas por abajo, barajando los límites de la dificultad
tanto en libre como en artificial extremo. Muchos de ellos experimentaron en la
Paret de les Bagasses el reto con lo imposible, y sentados en el Hostal del
Lago, planearon algunas de las más célebres ascensiones que han distinguido al
alpinismo catalán gracias al milagro de Terradets.
HISTORIA
- La historia de Terradets es relativamente moderna comparado con otras
grandes escuelas o paredes pirenaicas de cierta relevancia. No fue hasta el año
59 que la conocida cordada formada por Josep Manuel Anglada y Francesc Guillamón
(GAM) estrenara el pastel, con un trazado evidente y lógico para la época (1º
en todo el Montsec) que apenas sorprendió en las crónicas del momento. El
hábito por conquistar cimas vírgenes dejaba al margen los congostos y
murallones donde la ascensión a pie era elocuente y la cumbre de relativo
interés. La actividad por aquel entonces se centraba en lugares como los Mallos
de Riglos, el Pirineo, la cara norte del Pedraforca, els Ports o las paredes N
montserratinas. Solo unas pocas cordadas motorizadas tuvieron el privilegio de
explorar los lugares más apartados y abrir vías a sus anchas. Pese a su
envidiable y cómodo acceso había que llegar a Terradets, con vehículo propio, o
con el apoteósico ferrocarril que exigía un fin de semana más bien largo.
Gracias al Peugeot 403 de Claude Colin, Emili Civis, Ferrán Abella y Emili Gil,
se plantearon el objetivo más seductor adivinando largo a largo el trazado
preciso para sortear todos los obstáculos de la pared. Así nace la vía CADE
(63) después de varios asaltos con todo un arsenal de cuerdas y material, que
desde siempre ha sido la gran clásica del Montsec y una de las ascensiones más
bellas del pre-pirineo, incluida como no, en la célebre obra de Patrice de
Bellefon "Los Pirineos". Su segunda ascensión no llegó hasta el 65 a
cargo de Joan Martí (GEDE) después de tres intentos, dos con J. Banzo, y a la
tercera con Sergi Casademunt (en tren). Como anécdota curiosa, J. Martí con
Jordi Sans repetirían más tarde la aventura donde les sorprendió la noche, y
para continuar se las ingeniaron prendiendo fuego a los matojos de los muros
para iluminar la pared. Tras unos años de calma, a principios de los 70 la vía
Reina-Puig desvela otro magistral trazado, injustamente ensombrecido por la
fama de la vía CADE, que representará otra bella ascensión de similares
características, algo más directa y muy acertada. En el año 74, la célebre
cordada leridana formada por Jordi Vidal y Joan Enric Farreny todavía consigue
triunfar por el centro de la pared saliendo por el evidente espolón a la
derecha de la Anglada-Guillamón. Pero su obra más prestigiosa la realizan junto
con Emilio Albir por el espolón S-E de la muralla a finales del 75, encadenando
inteligentemente la sucesión de muros, fisuras y diedros con una dificultad
considerable para la época. Tanto es así, que durante su 1ª repetición, una
cordada barcelonesa colocó vergonzosamente varios buriles para progresar. El
aspecto monolítico de Terradets ahuyentó claramente a los adictos al buril y solo
unos pocos atrevidos tomaran el relevo para vencer un objetivo cada vez más
técnico. En pleno apogeo de las conquistas murcianas por todos los baluartes
peninsulares, Miguel Ángel García Gallego y Mariano Lozano aterrizan con un
"600" y realizan toda una demostración de "big-wall" por
donde más tira el asunto. La vía Murciana (76) resultará todo un reto para las
cordadas más atrevidas del momento, que pronto repetirán este magnífico
itinerario del congosto con o sin vivac. Mientras tanto, los jóvenes
"Piratas" montserratinos tendrán que subirse al tren y barajar las
escasas posibilidades de los suculentos muros del lugar, agotadas las fisuras y
trazados más elocuentes. La maestría de M. Arcarons, J. Parra y Ll. Fernández
enlaza minuciosamente los estigmas de la vía Merchely (77) consiguiendo un
trazado de categoría con el mínimo de expansión, que pronto destacará en las
crónicas del momento. La década de los 70 acaba con una relativa calma hasta
que en los 80 la fiebre del "free climb" llega a nuestro país
transformando radicalmente el panorama. Desde Madrid, Jesús Gálvez y Félix de
Pablos aparecen en Terradets para abrir la vía Villaverde (otoño-80), una
novedad que sin proponérselo, será el percutor de la transformación. Si bien
esta vía se abrió íntegramente por abajo y se equipó posteriormente para
realizarla con solo las cintas y los fisureros en plan moderno, el juicio
popular la condenó erróneamente como una herejía pre-fabricada. Dos oficiales
piratas como Antonio G. Picazo y Miguel Arcarons aún abordarán la vía del
Sergio (80), arrebatando el proyecto a las cordadas lleidatanes (G. Marín y
compañeros) que prácticamente la tenían acabada. También una lógica variante de
entrada a la vía CADE, la Supertramp (81), logrará una rápida aceptación
gracias a Manuel Pedro “Gastón” y Félix García. A partir de ésta, todo un
rosario de vías prefabricadas descolgándose desde la falsa feixa, pondrán de
moda un nuevo concepto de la escalada importado de las "falaises"
francesas: la escalada deportiva o "free climb", llamado por aquél
entonces. La vía Smoking fue la pionera de esta nueva etapa donde
paulatinamente se buscó el más difícil todavía. La experiencia fue todo un
éxito y a ésta le siguieron la vía de l'Alba, la TIM, Desenlace Inesperado y la
Colores, todas en el 81. La vía del Lobo, la Escaleras al Cielo y la Camarillo
Brillo, abiertas a la antigua usanza, fueron la excepción del fenómeno que
rápidamente arraigo en el lugar y se extendió al resto de escuelas catalanas
como Vilanova de Meià, el Pedraforca o Montserrat entre las más
representativas. Cabe citar la escuela de Montanejos (Castellón) como el
precedente más claro de itinerarios deportivos desde el 81, con una mentalidad
y equipamiento más moderno (espits) gracias a la visión de futuro de su
indiscutible promotor Ernesto López. A partir del 82 la réplica se acentuará
encajando una a una nuevas alternativas para llegar a la falsa feixa y no morir
en el intento: Tutti Frutti, Cha cha cha, Aqualum, Joan Freixenet y Color de
Rosa serán citas obligadas para variar de muros, presumir de grado y estrenar las
mallas más horteras. Paralelamente aparecen los "bordillos" para
ahorrar suela, energía, y aprovechar a la vez un terreno sucedáneo de patente
calidad. Titus Màgic posiblemente será el primero gracias a las avanzadas ideas
de Reche y Xavi Martin que pronto diseñarán la vía Olesa, la primera ruta
equipada por arriba en la Pared del Aéreo de Montserrat. Del 81 al 85 alcanzará
el máximo apogeo de les Bagasses, mientras que un sin fin de pequeñas escuelas
deportivas aparecerán como setas, dado el gran caudal de rocas y bordillos que
a nadie antes había interesado. Si bien la escalada libre fue la dictadura
popular de los 80, en contraste apareció la minoritaria afición por el
artificial extremo en consonancia con la aventura californiana que poco a poco
arrastró a más personal a cruzar el charco. Si bien en Vilanova de Meià ya se
jugaba con los estribos y los micro-pitones a estas alturas, la vía El Vuelo
del Ikaro (85) representará todo un referente del género artificial (A4) en
Terradets, al que posteriormente le seguirá El Cor de les Bagasses (87).
Destacar la labor realizada por Joan Freixas y Carles Romero, a los que debemos
la primera guía de escaladas sobre el congosto (junio-83) y vías como la
Atlántida (83). Con el malogrado accidente de C. Romero, sus compañeros más
directos, J. Freixas y M. Pedro "Gastón" abrirán una elaborada ruta
en memoria de éste (88), y otros itinerarios posteriores que dan fe de su
aprecio por el lugar, Jardí dels Déus (88) y Clàssic Nens (89). Otros fanáticos
"todo-terreno" como Francesc Pañella y Enric Camacho efectúan la vía
Mescalina (84), todo un banquete equipado para quedar saciado de exquisito
calcáreo hasta la cima. "Demasiado lejos para ir andando" (87)
prolonga un tiempo más el interés para llegar a la falsa feixa, cuando la
tendencia general lentamente abandona el congosto a la caza del 7º grado
habitual en el resto de escuelas. Durante las dos últimas décadas poca
actividad se ciñe por estos entornos, salvo la apertura de la atemporal vía de “l'Aranya”
y el reequipamiento de los itinerarios más famosos por los nostálgicos asiduos
que han vivido gran parte de esta breve historia, que si bien parece adormecer,
de seguro despertará para colmar otro futuro capitulo de escaladas en el Montsec.
Agradecer por último, la iniciativa de nombres como Luis Alfonso, Josep Mª
Porta, Josep V. Ponce, Franc García, Cesc Rosell, Xavier Buxó y los militares
de Jaca (entre otros), por su esfuerzo desinteresado por mantener el patrimonio
en buenas condiciones.
ESCALADA
- Como norma general, la técnica más utilizada en esta pared es la
adherencia y el canteo por las características rayas horizontales que corroen
los muros, que a la vez sirven de agarres más o menos profundos según la
morfología del terreno. Normalmente, hasta la falsa feixa las hendiduras
muestran su mínima expresión mientras que por lo general pasada ésta son toda
una bendición. En conjunto la roca es excelente salvo las zonas rojizas que en
ocasiones es mediocre. Los tramos en diedros o fisuras son muy puntuales y se
limitan a los itinerarios más clásicos, normalmente pulidos por la
frecuentación..
- El aspecto más negativo de Terradets es el continuo desgaste de las
presas debido al paso de las cordadas y al desmesurado uso del magnesio. En
itinerarios muy repetidos como la vía CADE hasta la feixa, es muy fácil patinar
por sorpresa ya que hay pasajes súper-pulidos como la tirada del
"dado" (L5). A partir de la gran feixa el defecto es mucho menor y
delata la retirada habitual del personal que solo efectúa la vía a medias.
- Cabe citar que el compromiso de esta pared es muy relativo dados los
posibles escapes por las feixas que facilitan un cómodo descenso a pie de la
mayor parte de los itinerarios. Los más severos son evidentemente los situados
en el corazón de la muralla donde los considerables desplomes no regalan más
que "patio" y obligan a alcanzar la gran feixa -como mínimo- para
abandonar la pared.
- Exceptuando las rutas de los desplomes (12,13,14,15 y 18), y las vías 5,
21, 23, 39, 49, 51, 53 y 54 donde es necesario la utilización de clavos, el
resto está prácticamente equipado (ver itinerarios) para ir con cintas exprés y
a lo sumo un juego de fisureros. Todos los itinerarios que terminan en la falsa
feixa (excepto 51 y 53) están totalmente equipados con chapas.
- Aunque la fiebre de Terradets ya hace años que paso, es frecuente
encontrar cordadas en las vías más famosas y sobre todo en las mejor equipadas,
que es lo que más se lleva actualmente.
- Todas las vías (salvo 14 y 15) se realizan en el día. El horario habitual
de la CADE hasta la cima puede oscilar entre 5 y 7 h. Para las rutas equipadas
hasta la falsa feixa calcular unas 3 h. de ascensión en condiciones normales.
- La mejor época para escalar en Terradets es la primavera y el otoño. En
invierno habrá que ceñirse al sol siempre y cuando el viento no sea el
protagonista. En pleno verano no se recomienda la escalada salvo si está bien
nublado, o bien por la tarde a partir de las 18 h. Llevar agua en todos los
casos.
APROXIMACIÓN Y DESCENSOS
- La aproximación es cómoda y evidente en la mayoría de los casos. Solo
basta cruzar el rio por el antiguo puente, subir a la vía del tren y atravesar
el túnel de la derecha. Para las vías 52 y 53 habrá que continuar por el
interior del siguiente túnel hasta localizar un ventanal característico. Para
la nº52 realizar un corto rápel y para la nº53 trepar directamente por el
terreno más asequible en general.
- El descenso desde la falsa feixa es el más corto y cómodo, solo hay que
atravesar por la cornisa totalmente a la derecha (cables) y seguir el trazo
bien marcado que en poco más de 20 min. conduce a la carretera. Esta opción
solo es válida desde la vía nº24 hasta la 53 inclusive.
- El descenso desde la feixa es el más habitual, ya que se trata de una
gran cornisa que atraviesa toda la muralla hacia el E y baja por un camino bien
marcado hacia la carretera en unos 30 min. Justo antes de tocar el asfalto
habrá que destrepar sobre una red metálica de protección, punto donde
encontraremos algún trozo de cuerda abandonado a tal efecto.
- La bajada desde la cumbre transcurre por un pequeño sendero próximo a la
arista cimera que baja progresivamente hasta un punto donde tuerce a la
derecha, unos tramos equipados con cables y cadenas descienden mirando al rio
hasta localizar más abajo una instalación al lado de un árbol característico
vestido de cintas y cordinos. Montar un rápel largo de 50 m o dos (30+20 m)
hasta la feixa principal y seguir bajando por ésta como la opción anterior
(calcular de 45 min a 1 h).
DATOS DE INTERÉS
- Para dormir de "pobre" lo mejor será desplazarse al apeadero de
tren de Àger (en la carretera que va de Terradets hacia Àger) donde una gran
nave cubierta resuelve el tema hasta próxima remodelación. Despertador
garantizado con el paso del primer tren de la mañana. También es posible el
vivac en el "Forat de l'Or", una profunda cueva-surgencia situada
justo enfrente de la pared de les Bagasses sobre la calzada de la carretera a
la altura del antiguo puente.
- En la estación de Cellers existe el único refugio-albergue de toda la
zona, con servicio de pernoctación, bar-comidas y libros de reseñas.
- Para acampar informarse previamente de los lugares autorizados (si los
hay), o ir directamente al camping situado a unos 5 km. pasado el congosto
dirección a Camarasa.
- Para desayunar y comer con garantías, en la Baronía de Sant Oïsme hay un
restaurante justo al lado de la carretera en dirección a Camarasa, cerca del
camping.
- En el famoso Hostal del Lago (Cellers) dispondremos de habitaciones,
restaurante y piscina para los más exigentes. Libro de piadas y comidas a todas
horas. Tel.: 973-650350.
- Para comprar en general, Tremp es la población más cercana de Terradets
(a unos 15 km.) con todos los servicios indispensables.
- Para abastecerse de agua, la Font de les Bagasses justo en el parking de
la pared, es el ritual más que habitual. Por regla general no dejar objetos de
valor en los vehículos.
ITINERARIOS PARET DE LES BAGASSES
1- Dallastasie (90 m. 6c). Equipada el 15-XI-84 por Ch. Carniato, J. F. Marsalle y D.
Labit. Bella escalada en placa vertical, sobre todo el primer largo. Llevar 9
cintas. Asegurada con espits. Descenso en rápel por la misma vía. Recomendable.
2- Mi Lindo Gatito (215 m. 6a/A2). 1ª asc.: 10-XI-91 por Luis Alfonso y Xavier Buxó.
Itinerario asequible en general con solo un largo destacable (L5). Desequipada.
Llevar 5 clavos, 1 gancho, fisureros y cintas largas para matojos. Un tanto
rebuscada, aunque con una cierta lógica. Herbosa y descompuesta.
3- Neurona Disidente (140 m. 6a). 1ª asc.: 16-VI-85 por Gustavo Mañez “Kush”, Francesc Subirana
y Eduard Viana. Línea un tanto rebuscada pero interesante en conjunto, con una
gran variedad de pasajes y totalmente equipada con buriles y espits. Llevar 10
cintas. Descenso en dos rápeles de 45 m.
4- Currupipi (80 m. V+). 1ª asc.: 29-IV-95 por Javier Sáez y Luis Alfonso. Dos tiradas
en roca muy buena. Llevar un fisurero mediano para el inicio. El primer largo
ya estaba abierto por G. Mañez en el 92. Equipada con parabolts 8 mm y clavos.
Seguros alejados. 8 cintas.
5- Spanish Punk (230 m. V+/A0). 1ª asc.: 6-IX-83 por Jesús Martínez, Esteban Hernández y
Jean Charles Peña. Itinerario pionero de este sector, poco frecuentado y equipamiento
escaso (2 buriles y 3 clavos), por lo que resulta difícil de reseguir en
general. Roca aceptable con algún tramo delicado. Llevar 3 pitones variados,
los fisureros y unas 10 cintas.
6- Olga (300 m. 6a). 1ª asc.: 5-V-85 por Jesús López, Mariano Piñuelas, Federico
Cebollada y Olga Jesús. Interesante escalada semiequipada con pitones y algún
buril, que cuenta con un sinuoso trazado poco frecuentado por lo general.
Segundo largo algo expuesto. Llevar un universal, fisureros y friends medianos.
7- Pibe Mongo (50 m. 6c+). Equipada en el 84 por P. Botey, J. Pou, V. Colomé y O. Ribas.
Magnífica escalada en placa pero con los seguros algo deteriorados. Entrada
explosiva. Equipada con buriles y clavos. Llevar 9 cintas. Descenso en rápel
por la misma vía.
8- Titus Màgic (55 m. V). Equipada el 5-XII-81 por Reche y Xavi Martin. Estupenda placa
de dificultad moderada aunque con los seguros viejos y alejados (buriles y
clavos). Llevar 6 cintas. Descenso en rápel. Posiblemente la primera vía de
bordillo de España.
9- Espai, Temps, Acte (70 m. V+). Equipada (sin datos). Bonita placa exageradamente equipada con
espits, sobre todo el último largo (hasta 15 chapas). Descenso en rápel.
10- Vía del Txacu (55 m. 6b). Equipada el 9-XII-84 por V. Colomé, O. Ribas, P. Botey y J.
Pou. Magnífica escalada en placa pero con los seguros deteriorados (buriles).
Llevar 7 cintas. Descenso en rápel.
11- Plexus Scolaire (65 m. 6b). Equipada (sin datos). De las mismas características que la
anterior pero algo más asegurada. Llevar 8 cintas. Descenso en rápel por la
misma vía.
12- Atlántida (255 m. A1/V). 1ª asc.: 10-VI-83 por Joan Freixas, Carles Romero y Manel
Pedro "Gastón". Una primera parte por placas con algo de musgo donde
encontraremos las mayores dificultades, llevan a una parte central mediocre y
herbosa que conduce a unas bonitas fisuras y placas superiores. Para forzar en
libre resulta un tanto expuesta. Llevar 4 clavos variados, 1 gancho,
cordinillos y el juego de friends (0-4). Semiequipada con buriles. Trazado de
aventura evidente y recomendable en conjunto.
13- Escaleras al Cielo (560 m. 6b/A2). 1ª asc.: 13-IV-81 por Pere Xavier Porta, J. Grau y Manel
Solís hasta la feixa, y 1-XI-95 por Julián Tolosa y Manel Solís hasta la
cumbre. Una extensa representación de 15 años de escalada en Lleida, donde lo
mejor de las diferentes generaciones lleidatanes han sido partícipes de esta
magnífica ruta, una de las más impresionantes y largas del Montsec. Semiequipada
con buriles, clavos y espits. Llevar 10 pitones variados (1 bong), un gancho, 3
chapas, fisureros y friends (0-3). La parte superior cuenta con tramos
comprometidos en roca delicada. Calcular unas 8 h. hasta la feixa y unas 12 h.
hasta la cima. Bastante repetida hasta la feixa.
14- El Vuelo del Ikaro (135 m. 6a/A4). 1ª asc.: 6-IV-85 por Fernando Lertxundi, Joan Olivé y J.
Lluís Sasot. Escalada técnicamente muy exigente con un segundo largo donde hay
que dominar el artificial delicado y expuesto. El resto se realiza en escalada
libre semiequipada sin regalar nada, hasta enlazar con el L7 de la vía
anterior. Llevar unos 15 clavos variados, 15 plomos, ganchos y fisureros. Se
desconocen repeticiones.
15- El Cor de les Bagasses (250 m. 6b/A3). 1ª asc.: junio-87 por Xavi Cullell, Sergi Parcerisas y
Koki Gassiot. La ruta más laboriosa de la pared con un espectacular y atrevido
trazado que supera directamente la zona más desplomada. En su apertura
coincidió con el L3 del Vuelo del Ikaro donde se colocaron 2 espits para
realizarlo en libre (antes A2+). Llevar unos 20 pitones, ganchos, plomos, cuñas
de madera, fisureros, excéntricos y friends. Calcular dos días para ir
tranquilos. Se desconocen repeticiones.
16- Tramontane (50 m. 7a). Equipada el 2-I-90 por Emmanuel da Silva. El itinerario más
difícil de los "bordillos" por terreno excelente, con un L2 en ligero
desplome, hecho poco habitual en esta zona. Asegurado con espits del 10 y 3 pitones. Llevar 9 cintas.
17- Si fas free no fa fred (45 m. 6a). Equipada en diciembre-87 por Albert Cortés, Adolf Castro,
Xavier Castells y Araceli Segarra. Placa de inmejorable calidad generosamente
asegurada con espits. Llevar 9 cintas. Una de las más repetidas con una
dificultad máx. obligada de V+.
18- Murciana (480 m. 6a/A2). 1ª asc.: 19-V-76 por Miguel Ángel Gallego y Mariano
Lozano. Trazado atrevido y elegante donde no se regala nada. Representa un
clásico objetivo de dificultad en la línea de los itinerarios de Roca Regina
pero con una feixa que facilita la retirada. Una jornada completa y variada de
aventura por desplomes y muros de calidad, donde serán útiles clavos anchos
dadas las dimensiones del continuo pitonaje. Llevar 6 uves, 3 bongs normales, 3
universales, cuñas de madera, fisureros y 2 chapas.
19- Anglada-Guillamón (500 m. Vº). 1ª asc.: 12-IX-59 por Josep Manuel Anglada y Francesc
Guillamón. La ruta pionera y la más asequible del repertorio, con un trazado
benévolo que invita a explorar gran parte de la muralla sobre buena roca y con
menos hierba de lo que aparenta. Se suele hacer solo hasta la feixa por lo que
en la parte superior encontraremos poca cosa (algún clavo). Pasajes claves
asegurados con buriles, clavos y parabolts. Llevar algunas chapas y los
fisureros. Última tirada más sorprendente que difícil. Recomendable.
20- Mescalina (430 m. 7a). Equipada : 22-I-84 por Francesc Pañella y Enric Camacho. Una sobredosis
de calcáreo bien asegurado, con largos muy variados donde se intercalan muros
exigentes con tramos muy disfrutones. Dificultad máxima obligada : 6a/A0. Reequipada
con parabolts, bastante rápida (6 h), y con una roca de primera aunque con los
pasajes claves pulidos por lo general. Llevar unas 10 cintas y algún friend
mediano. Muy recomendable.
21- Carles Romero (500 m. 6a/A1). 1ª asc.: 10-VII-88 por Joan Freixas, Manel Pedro, Paco
Cáceres y Jordi Hidalgo. Primer tercio claramente encajado entre los
itinerarios circundantes mientras que el resto presenta un trazado atractivo y
acertado. A partir de la gran feixa se acentúa el uso de expansión superando de
la forma más directa la barrera de desplomes y saliendo por muros de calidad.
Semiequipada con espits y clavos. Roca buena. Llevar 5 pitones variados y los
fisureros. Recomendable.
22- Vidal-Farreny (500 m. 6a/Ae). 1ª asc.: 12-I-74 por Jordi Vidal y Joan Enric Farreny. Una
de las grandes clásicas de la pared, muy interesante hasta la feixa y más
sencilla hasta la cima. Máximo obligado : Vº. Prácticamente asegurada con
clavos y parabolts. Llevar unas 10 cintas, los fisureros y friends al gusto.
Roca buena. Parte superior menos frecuentada y por lo tanto equipamiento
escaso. Último largo más espectacular que difícil. Recomendable.
23- Lenticularis (200 m. 6b). 1ª asc.: año 1983 por Dani Garín, Oriol Pié, Damián Viladrich,
Franc García y R. Salvador. Vía poco repetida en general pese a que va buscando
los tramos más accesibles de la pared hasta encontrarse con el largo de
artificial de la CADE. Trazado algo sinuoso en el que encontraremos unos pocos
buriles y clavos que ayudarán a reseguirlo. Máximo obligado: Vº. Llevar un par
de pitones, los fisureros y friends.
24- Orbital Molecular (50 m. V+). 1ª asc.: (sin datos) por A. Gallart y Moncho. Se trata de una
variante de entrada a la Supertramp asegurada con 3 buriles y un clavo.
25- Supertramp (200 m. V). 1ª asc.: 19-IV-81 por Félix García y Manuel Pedro
"Gastón". Uno de los itinerarios más pulidos y frecuentados de
Terradets por su asequible dificultad y variedad de pasajes, que se distingue
claramente desde lejos por su línea más clara con respecto al resto de los
itinerarios. Rápida y acertada entrada para combinar con la CADE o bien salir
por la falsa feixa. Reequipada con parabolts. Llevar 10 cintas y los fisureros.
Recomendable.
26- CADE (500 m. V/A1). 1ª asc.: 24-IX-63 por Claude Colín, Emili Civis, Ferrán
Abella y Emili Gil. Ruta histórica indispensable que desvela largo a largo
todos los secretos de la pared. Roca muy pulida en general hasta la feixa,
factor que aumenta el grado en muchos pasajes claves. Parte superior igual de
imprescindible aunque la mayoría se escapan por la feixa. Generosamente
reequipada con parabolts y clavos. Llevar 12 cintas, los fisureros o aliens.
Habitualmente frecuentada dadas sus características. De 5 a 7 h.
27- Quo Vadis (300 m. 6a/Ae). 1ª asc.: 15-VI-85 (hasta falsa feixa) por Lluís Olóndriz,
Rosendo Oliva, Eduard Ribes y Sergi Rossell (posteriormente hasta la feixa en
el año 88). Itinerario recientemente reequipado con parabolts que resigue una línea
directa un tanto rebuscada, cruzándose con las vías Supertramp y CADE acertando
en los largos centrales antes de enlazar con la CADE. 6a obligado. Llevar 16
cintas y los estribos. Recomendable.
28- Tutti Frutti (225 m. 6a). 1ª asc.: junio-82 por Dani Garín, Frank García, Francisco Martínez,
Víctor Viciana, Damián Viladrich y Román Salvador. Vía en placas bien asegurada
con parabolts, con una dificultad asequible en general (Vº obligado). Solo en
los dos últimos largos encontraremos un par de 6a para alegrar la fiesta.
Llevar 10 cintas y los fisureros.
29- Cha cha cha (230 m. 6b/Ae). 1ª asc.: 11-VII-82 por Xavi Besora, Jordi Besora y Ricard
Castellví. Otra agradable alternativa con las placas típicas de la zona, cosida
recientemente con parabolts por miembros de la Escuela Militar de Jaca. Roca
buena con algún tramo rotillo puntual. La cuarta tirada concentra las mayores
dificultades. Llevar unas 14 cintas, cordinos largos y algún friend para el L4.
30- Desenlace Inesperado (240 m. 6b). Equipada el 18-X-81 por Cristóbal Trujillo, Bartolo Pérez,
Pep Boixadós, Juan Vergara, Santi Archs y Víctor Vilagrasa. Una de las primeras
muestras del fenómeno "free climb" de la época, que marca la frontera
entre lo clásico y lo deportivo que claramente de prolonga hacia la derecha.
Reequipada con parabolts por Josep Mª Porta y Josep V. Ponce (2002). Llevar 8
cintas. Máximo obligado: 6a+. Trazado estético y recomendable aunque con los
seguros alejados. Equipada para rapelar.
31- Vía del Sergio (325 m. 6b). 1ª asc.: 21-XII-80 por Miguel Arcarons y Antonio García
Picazo, pese a que el trazado de encontraba prácticamente abierto por cordadas
del SEAM de Lleida. Ruta de corte clásico reequipada con parabolts gracias a
Josep Mª Porta y Luis Alfonso. Lógica sucesión de placas hasta la falsa feixa,
para continuar por la atlética fisura-diedro central de la pared que le da
carácter y rompe la monotonía entre tanto muro. Roca buena salvo al comienzo
del L8. Máximo obligado: V+. Llevar 10 cintas (largas), fisureros y friends
(1-2-3).
32- Reina-Puig (460 m. V+/Ae). 1ª asc.: diciembre del 73 por Gabriel Reina y Josep Puig.
Nunca ha tenido la fama de la CADE pero su trazado es igual o más acertado,
seductor y solo pulido en algún tramo muy puntual (L5). Gran variedad de
pasajes en placas y diedros, destacando la travesía del gran techo de la parte
superior como lo más pintoresco de todo el itinerario. Reequipada con parabolts
por los militares de la Escuela de Jaca. Llevar unas 10 cintas (largas), los
fisureros y calcular unas 5 h. Máximo obligado: 6a. Muy recomendable,
frecuentada (hasta falsa feixa) y asequible en general.
33- Jardí dels Déus (200 m. 6b+). Equipada el 2-X-88 por Joan Freixas y Manel Pedro
"Gastón". Vía un tanto rebuscada que gracias a su generoso
equipamiento (espits) se repite con cierta frecuencia. Máximo obligado : 6a.
Antes de llegar a la falsa feixa existe un pasaje de A0 o 7a+ de bloque
evitable por la vía Reina-Puig. Llevar 12 cintas.
34- Vía de l'Alba (200 m. 6a+). Equipada el 29-VIII-81 por Josep A. Macau, Jordi Clariana,
Quico Polls, Abel y Alba Bosch. Por su antigüedad escoge el mejor terreno a la
derecha de la vía del Sergio, por lo que ofrece una agradable escalada bien
asegurada y con pasajes muy variados (V+ obligado). Actualmente se encuentra
reequipada con parabolts gracias a la altruista labor realizada por Jordi
Clariana, Josep V. Ponce, J.M. Arizón y Luis Alfonso. Llevar 10 cintas.
Recomendable.
35- TIM (210 m. 6a+). Equipada el 4-X-81 por Joan Wenceslao, Santi Marzo, Lluís
Baciero y Manel Balet. Bella escalada en conjunto en la que destaca el rabioso
segundo largo (Dado) y los exquisitos muros de la parte superior
afortunadamente poco pulidos en general. Reequipada con parabolts, aunque algo
alejados respetando el equipamiento original. Llevar 12 cintas. Muy
recomendable.
36- Variante francesa (20 m. 6b). Equipada (sin datos). Difícil largo que supera el
"dado" por el centro. Asegurada con 5 parabolts.
37- Aqualum (230 m. 6b). Equipada el 5-XII-82 por Lluís Baciero, Santi Marzo, Frank
García, Víctor Viciana y Dani Garín. Bella escalada en conjunto en la que
destaca el genial segundo largo (Dado), con posible variante por la derecha (6c+),
y la acertada sucesión de muros en libre moderado aunque con pasos puntualmente
difíciles y obligados. Reequipada con parabolts. Llevar unas 12 cintas. Muy
recomendable.
38- La Castanya (60 m. 6a). Equipada el 3-XI-91 por Cesc Rosell y Luis Alfonso. Variante
de salida que aprovecha unas bellas placas de inmejorable calidad. Se accede a
ella por las vías Merchely, Aqualum o Reina-Puig. Asegurada con parabolts.
Llevar unas 9 cintas. Recomendable.
39- Merchely (425 m. 6a/A1). 1ª asc.: 18-VII-77 por Miguel Arcarons, Juan Parra y J.
Luis Fernández. Itinerario clásico con un sorprendente trazado a la caza de
todas las fisuras que salen al paso. Todos los largos son diferentes por lo
escapan a la monotonía. Normalmente se realiza solo hasta la falsa feixa porque
la continuación son unas fisuras, que sin ser obligadas, hay que trabajarlas
(A1/V o 6c). A partir de la gran feixa la vía pierde interés y raramente se
repite. Reequipada con parabolts. Llevar unas 12 cintas y los fisureros si solo
la realizamos hasta la falsa feixa. Para el resto será prudente llevar, además,
5 pitones y 5 chapas. Recomendable.
40- El Perverso y la Muñeca (20 m. 6c). 1ª asc.: (sin datos) por John Redhead y Marcel Millet. Surca
el margen derecho del característico "Dado" de forma obligada y
expuesta, en donde solo encontraremos un par de parabolts y un clavo. Llevar
los fisureros y cintas para merlets.
41- Gorostiza el almendrón (60 m. 6a). 1ª asc.: 7- XII-93 por J. Carlos Guichot y Aurora. Se trata de
una amortizada y bonita entrada directa a la vía Villaverde. Equipada con
espits. Llevar 7 cintas.
42- Villaverde (220 m. 6a). 1ª asc.: 5-X-80 por Jesús Gálvez y Félix de Pablos. Primeros
largos sinuosos barajando todas las posibilidades del terreno, para atacar
directamente la placa "charter" y el acertado muro final. Una gran
clásica por excelencia reequipada con parabolts y clavos. Llevar unas 10 cintas
(largas) y los fisureros.
43- Demasiado lejos para ir andando (200 m. 6b). Equipada el 3-V-87 por Francesc Pañella "Pany",
Luis Alfonso "Luichy" y Francesc Suñol. Una de las rutas más
repetidas y populares dados sus magníficos pasajes, generoso equipamiento
(espits) y cuyo nombre define perfectamente la actitud general de la época, que
marca el inicio de las vías de más dificultad por la continuidad de sus placas.
Llevar 11 cintas. Muy recomendable.
44- Smoking (215 m. 6b). Equipada el 3-V-81 por Lluís Hortalà, Ramón Santamaría, Pep
Boixadós y Pep Masip "Nifo". La primera vía de Terradets elaborada
con las máximas garantías de seguridad que pronto sucedió clásica como
manifiesta el pulido de sus agarres. Durante su reequipamiento, el 5º largo se
trazó directo por capricho (6b), quedando a la izquierda los buriles originales
(V+). Posibilidad de rapelar por la misma vía. Llevar 9 cintas. Muy
recomendable.
45- Joan Freixenet (210 m. 6b). Equipada el 26-VI-82 por Lorenzo Puertas, Manolo Navarro,
Miquel Àngel Casals, Jaume y Josep Massana. Fue la réplica de los escaladores
locales más acreditados, a la desenfrenada carrera de los barceloneses por
equipar itinerarios. Vía similar a las anteriores que en la actualidad cuenta
con un reequipamiento más generoso que el original. Llevar 10 cintas.
Recomendable.
46- Espolón Vidal-Farreny-Albir (350 m. 6a/A2). 1ª asc.: 19-XII-75 por Jordi Vidal, Joan Enric Farreny y
Emilio Albir. Con su seductora línea, esta vía fue durante mucho tiempo todo un
referente por su dificultad, donde incluso se añadieron algunos buriles en sus
primeras repeticiones rebajando su compromiso original. En la actualidad se
encuentra perfectamente reequipada con parabolts y clavos, aunque son
necesarios los fisureros y los camalots hasta nº3 para los tramos fisurados que
la diferencian claramente de sus vecinas líneas en placa diseñadas desde lo
alto. Pese a su terreno irremediablemente pulido, bella y recomendable.
47- El Engendro (200 m. 6c). Equipada el 7-V-88 por Miguel Ángel Golvano, David Brascó,
Francesc Pañella y Luis Alfonso. Sostenido y elegante itinerario excelentemente
equipado con parabolts que aprovecha el terreno libre a ambos lados de la vía
anterior. Dificultad exigente y obligada en general. Llevar 10 cintas.
48- Colores (200 m. 6b+). Equipada el 6-XII-81 por Juan Carlos Aldeguer, Josep A.
Macau, Conrad López, Julio Valera y Sergio Martínez. Una de las mejores vías en
libre equipadas de la pared, con un trazado muy logrado y un desplome final
excepcional. Reequipada con espits. Llevar 7 cintas. Máximo obligado: 6b (L2).
Muy recomendable aunque exigente por sus seguros alejados acordes con la fecha
de fabricación.
49- Vía del Lobo (385 m. A1/V+). 1ª asc.: 16-V-81 por Josep Lluís Moreno, Xavi Rodríguez y
Fernando Lertxundi. Atractiva escalada de ámbito clásico que se caracteriza por
la llamativa laja-bavaresa de la 2ª tirada. Hay alguna chapa rota en el 7º
largo (A1/V), el más difícil en libre (7a+). La parte superior no se repite
prácticamente nunca. Equipamiento: buriles y clavos. Llevar los fisureros, 1
chapa y 6 pitones variados (parte superior).
50- Strip Legal (240 m. 6c+). Equipada en otoño-84 por Joan Cabau, Toni Massana, Joan
Wenceslao y Eduard Burgada. Uno de los trazados más extremos de la pared con
solo dos largos fáciles de trámite. El inicio de la vía se encuentra muy cerca
del río por lo que habrá que prestar atención al nivel del agua, a tal efecto
existen unos buriles que flanquean desde más arriba. Para forzar en libre el 6º
largo hay que ir por la izquierda del Ae en 7a+ expo. Equipamiento: buriles y
espits, alejados en ocasiones. Llevar 14 cintas. Poco repetida.
51- Vía de l'Aranya (250 m. V+/A2). 1ª asc.: 1-V-95 por Joan Altimira y Joan Franc Pascual.
Itinerario abierto pasando "olímpicamente" de las vías vecinas
siguiendo el criterio de la pared al estilo clásico. Se accede desde el
ventanal del túnel del tren mediante un corto rápel y caminando hasta el pie
del muro. Semiequipada con espits y clavos. Llevar un buen surtido de pitones
cortos, ganchos y baguetillas. Se desconocen repeticiones.
52- Color de Rosa (210 m. 6c+). Equipada el 18-IX-82 por Cristóbal Trujillo, David Subirana,
Joaquín Olmo, Jesús Martínez y Juan Vergara. Vía progresivamente interesante
cuya segunda parte representa todo un duelo entre desplomes con ambiente y
decisión. Máximo obligado: 6a. Asegurada con buriles, en ocasiones alejados.
Llevar unas 14 cintas y fisureros (opcionales). Acceso como en la vía anterior
hasta situarse al pie de la gran placa del L1. Recomendable.
53- Clàssic Nens (170 m. 6b/A1). 1ª asc.: 14-VI-89 por Joan Freixas y Manel Pedro
"Gastón". Itinerario de corte tradicional con tramos delicados,
fisuras por pitonar y pedaladas como las de antes. A causa del desprendimiento
de una gran laja, el L3 quedó muy afectado y expuesto (ahora 6b). Llevar los
fisureros y unos 8 clavos variados. Cuenta con pocas repeticiones. Acceso desde
el ventanal del túnel del tren.
54- Camarillo Brillo (180 m. V+/Ae). 1ª asc.: 21-III-81 por Francesc Sorolla, Joan Wenceslao,
Manel Balet y la colaboración de Josep Torner. Esta vía arranca por encima de
la feixa a partir de la CADE, por un evidente diedro que conduce al extremo
izquierdo del gran techo de la vía Reina-Puig. Aunque a primera vista no parece
complejo, los buriles de seguro son muy escasos y las excursiones habituales.
Llevar 8 cintas, 4 clavos, los fisureros y un gancho. Una combinación
interesante a tener en cuenta.
ROCA REGINA
- Perpendicular a la Paret de les Bagases y por detrás de ésta, la Roca
Regina o Salt de la Reina Mora es una parte del contrafuerte montañoso del
Montsec situada al norte del mismo y separada de él por un salvaje barranco
llamado Torrent del Bosc. Hacia Cellers, la Regina, cómo popularmente se la
conoce, se inclina en suave pendiente mientras que la parte que mira al
barranco forma un impresionante paredón sumamente vertical de casi 400 m de
altura. Este magnífico retablo gris, ha sido el lienzo para los principales
aperturistas del país que han plasmado su obra en un terreno limitado de lógica
pero fecundo en verticalidad y dificultad. Más de 30 años han sido necesarios
para explorar minuciosamente la muralla mediante 29 itinerarios de gran envergadura,
totalmente diferentes al resto de las vías del congosto. La estructura de la
pared obliga a una escalada mucho más laboriosa y artificial en ocasiones,
salvo las vías más antiguas y algunos itinerarios más modernos, que con el
tiempo y la mejora de su equipamiento de realizan en escalada libre de gran
dificultad. El grueso de las rutas abiertas corresponden al estilo denominado “Big-wall”,
que sin quererlo ni beberlo se le adjudicó rápido la etiqueta cuando se
comprobó su similitud con las aventuras Yosemíticas que llegaron por ultramar a
principios de los 80.
Gracias a su agraciada situación, la Roca Regina es hoy por hoy un cómodo
banquete para los amantes del “Big-wall”, y cita ideal como entreno hacia
mayores pretensiones. Escalar aquí representa ganarse a pulso su considerable
desnivel y cerciorarse además, que el tiempo en este sosegado rincón del
Montsec también pasa volando.
HISTORIA
- A primeros de los 70 empieza la historia de Roca Regina cuando la Paret
de les Bagasses sólo contaba con las vías Anglada-Guillamón (59) y la CADE
(63). La inquieta cordada del GEDE compuesta por Joan Martí y Cèsar Comas
atacan la arrogante línea de techos entrando por la feixa, y tras cinco largos
abandonan lo que será más tarde la vía Barrufets. Curiosamente el frustrado intento
superaba el gran techo hacia la izquierda, tramo que aprovecharon los
aperturistas de la ruta Ball de Rams quince años después. Escaladores del GAM
exploran el sector central de la muralla y empiezan un trazado directo hacia la
única opción asequible a primera vista. Después de superar cuatro tiradas y
tras un periodo de abandono, cordadas del Centro Excursionista de Lleida de
cuelan en el intento llegando al bosque colgado a media pared, pero quedan
frenados al terminar los recursos naturales. Definitivamente Ramón Galí y Julià
Molero entran por la feixa el 30 de octubre del 71, y con un lastre de 20 kg de
mochila se funden con el misterio de la gran aventura que dará como resultado
el primer itinerario de la Regina: la vía Galí-Molero. Tres intensas jornadas
con dos vivacs en pared clausuraron este ambicioso trazado actualmente el más
repetido de toda la pared. Un año más tarde, la cordada Ribas-Vidal realiza la
evidente Arista Este.
A primeros del 77, Jordi Jutglar, Ramón Artigas, J.A.Vicente y José Mª
Peralta abren la vía Aniversario promoviendo así el asalto de los inquietos
aperturistas del momento, entre ellos los jóvenes Piratas afincados en la
Ciudad Condal. Antes de finalizar el año, Antonio García Picazo e Ignasi Ruiz
de Barcelona y Juan López de Madrid dejarán un buen tributo en recuerdo al
malogrado Pere Camins fallecido al precipitarse en la Arista del Jiso (Picos de
Europa) aquel triste verano. Si no fuera por ello, inicialmente la ruta se
quería bautizar como vía Unión en hermandad entre escaladores catalanes y
madrileños. Esta vía marcó la época iniciando una dilatada carrera de primeras
muy representativas hasta la aparición del Free
Climb, precisamente en los vecinos muros de la Paret de les Bagasses a
primeros de los 80.
Si los Piratas acapararon los titulares en las crónicas, paralelamente los
Barrufets colocaron silenciosamente sus evidentes primeras en respuesta a la
joven generación que arrasaba todo aquello que sobresalía en el panorama
vertical. Los comentarios de Joan Martí (guarda del refugio Estasen), llevan a
los Barrufets (Remi Brescó, Jordi Camprubí, Albert Gómez y Xavi Pérez Gil) por
la línea característica de techos mencionada, y prosiguen directamente hasta el
final de la Arista Este. Sin duda alguna, uno de los itinerarios más bellos de
Regina que le diferencian claramente del resto por su variedad, estética y
espectacularidad.
José María Peralta, buen conocedor del congosto, suma tres nuevos
itinerarios al sector: la vía Aries, la Taj Mahal y la Seira, rutas poco
repetidas salvo la segunda que en poco tiempo se coloca a la altura de la Pere
Camins en cuanto a repeticiones. Entre tanto, Eric Promio (STAE) y Josep Lluís
Moreno (SAME) abren prácticamente en libre un sugestivo trazado que no tardará
en proclamarse clásico: la vía Promio-Moreno. Menor suerte tendrá la vía
Olimpia a cargo de los malogrados Manolo Martínez e Ignasi Ruiz “Nacho”, que
pese a su modesto desnivel, su apariencia es más que suficiente para repeler al
personal.
Del 83 al 85 la Roca Regina caerá rendida ante la figura de Jesús Gálvez de
Madrid, qué conseguirá a sus anchas cinco nuevas rutas: Gwendal, Génesis,
Trópoma, Arkalis y Thor, cuando el afán popular se distrae con todo menos con
el martillo y los pitones; ha llegado el grado deportivo y con ello las
escuelas de moda para lucir las mallas y las cintas exprés.
Asimismo un grupo de Balaguer conocido como Kafarnaú (Alx Baldillou, Jordi
Muñoz y Pepe Pinar) actúan contracorriente abriendo la vía Ball de Rams entre
otras atrevidas primeras diseminadas por la Noguera y el Montsec de Rúbies.
Desgraciadamente un trágico accidente en los Alpes acaba con dos miembros del
trió en verano del 86. Para finalizar la accidentada década de los 80, dos
vías: Postmortem y la Vida en el Filo, que representan la prolongación de la
etapa equipadora que se resignaba a evitar esta pared por su aspecto mediocre.
Unas buenas chapas serán suficientes para resucitar el sector menos atractivo
de la muralla y consagrarlo para el libre deportivo en gran pared.
Los años 90 traen la “New Age” y con ello el retorno a los pitones,
ganchos, plomos y demás artilugios semi-oxidados que vuelven a arañar la roca
palmo a palmo entre espit y espit. Luis Alfonso “Luichy”, Marc Arbós y Xavier
Buxó son conscientes de que no todo es el grado prefabricado, la aventura surge
abriendo desde abajo. Así nace la vía Anasazi gracias a Pep Masip “Nifo”
(mayo-93) tras 50 h de fatigosa y ardua progresión en solitario. Tampoco Jaume
Clotet se queda corto con su aventura, y con su estilo nos ofrece una de sus
tantas Fiestas del Paca en primavera del 94. Unas semanas después, y por si alguien
estaba irritado por el equipamiento de una vía deportiva en la Paret de
Catalunya (vía Escanyapobres), los taladros definen los movimientos del
rocódromo a seguir entre las vías Taj Mahal y Pere Camins. Como resultado
aparece: Maldita sea mi suerte, despertando de nuevo la polémica entre los más
radicales defensores del “Big-wall” y la apertura tradicional no prefabricada.
Por el momento aún está ahí y no ha corrido la misma suerte que la ruta de
Montrebei borrada totalmente del mapa y re-abierta de nuevo desde abajo. Mientras
tanto, Ernest Bladé y Albert Castellet (CADE) descubren tirada a tirada la vía
Tudiguembú, sin tener que arrimarse a nadie entre la Barrufets y la Postmortem.
Dos artesanales alternativas de suman al repertorio en el 95: la vía Júper a
cargo de Pere Campanera y Julián Marmol, y la vía Hakuna Matata por la
incombustible cordada formada por Sílvia Vidal y Pep Masip “Nifo”, ambas para
curtir el espíritu al genuino ritmo del “Big-wall”.
ESCALADA
- Podemos dividir la pared de la Regina en tres niveles bien definidos: el
primero hasta la feixa, el segundo los 100 m por encima de ésta, y por último
el resto hasta la cima (unos 150 m). El primer tercio contempla una escalada
muy vertical donde predomina la técnica combinada, un tramo desplomado
característico y una roca sazonada de lajas y líquenes. El segundo nivel por lo
general empieza en artificial y cuanto más al centro de la pared, más laborioso
y precario por la mediocre calidad del terreno (vías Arkalis, Thor o Anasazi).
Sin duda alguna el último tercio ofrece los largos más agradecidos con roca de
calidad y escalada libre que nos recuerda los muros de las Bagasses, extraordinariamente
compactos y con franjas horizontales. Por lo general los itinerarios aprovechan
al máximo las escasas fisuras donde pitonar, hecho que hace posible forzar en
libre estos tramos gracias a los agujeros originados por el despitonaje. En
estos casos, la destreza colocando fisureros o microfriends es vital a la hora
de rebajar horario o simplemente para prescindir de la maza. Las vías más
repetidas, como es lógico, son las que gozan de la roca más saludable y en
ocasiones pulida, no obstante habrá que ser discretos traccionando alguna que
otra laja, y sobre todo con la caída de piedras si hay personal por debajo.
En cuanto a la técnica destacar la escalada sobre muros y placas con
movimientos atléticos, elegantes y un tanto monótonos típicos del Montsec.
Exceptuando los trazados equipados por arriba y unas pocas clásicas
reequipadas, el resto posee el equipamiento original. Como norma general serán
útiles los cordinos, cintas largas y alguna chapa recuperable. La mayor parte
de los itinerarios son de difícil abandono desde el último tercio, y habrá que
prestar mucha atención al recorrido para no liarse con las rutas más cercanas.
Como muy bien se aprecia en el dibujo panorámico, el sector central de la pared
es una auténtica arteria que en ocasiones sólo existen entre 10 y 15 m de
separación entre los trazados. Alerta en la feixa donde la similitud entre
algunos es realmente notable. La mejor época para escalar en Roca Regina es en
primavera y otoño, en pleno verano puede ser un buen entrenamiento para
triunfar en agosto en Yosemite, roca caliente garantizada y agua por un tubo.
La vertiente sur de la Regina está expuesta al sol desde las 10:00 en adelante.
Aún en pleno invierno la temperatura en las horas centrales del día suele ser
bastante cálida.
APROXIMACIÓN Y DESCENSOS
- Para llegar al pie de la pared existen a cada lado del barranco, unos
senderos bien trazados que en poco más de 10 min llevan a la base de la
muralla. Destacar que el cauce excavado del río dificulta el acceso por lo que
será necesario treparlo por el lugar más asequible. Lo habitual es dirigirse
hacia el pie de vía de la Galí-Molero y desplazarse por el pie de la pared.
Para entrar directamente por la feixa, desde la presa y justo al lado del
túnel del tren, sale un camino ascendente que lleva en poco más de 15 min al
pie de la vía Olimpia. A la altura de la vía Barrufets, ésta desaparece. Unos
anclajes con un pasamano permiten salvar este tramo hasta que de nuevo de
ensancha el terreno y continuamos caminando hasta el otro extremo.
Evidentemente la feixa también sirve para abandonar la pared realizando el
trayecto a la inversa.
Para bajar desde la cumbre será necesario localizar un sendero que nace
aproximadamente a la salida de la vía Pere Camins. Primero entre matorrales y
más tarde por una exuberante canal, el camino desciende hasta situarnos sobre
el talud de la vía del ferrocarril el cual habrá que rapelar convenientemente,
o bien atravesar hacia la izquierda hasta el punto que podamos bajar andando
dirección a la estación del tren (calcular unos 45 min). Otra interesante
opción será bajar por la Arista Ribas-Vidal mediante un par de rapeles (30+45
m), que nos conducen a la salida de la vía Postmortem donde localizaremos un
pequeño sendero señalizado con marcas rojas que enlaza repisas y feixas descendientes
hasta alcanzar la carretera (30 min).
ITINERARIOS DE LA ROCA REGINA
1- Aries (215 m V+). 1ª asc.: 17-II-79 por J.Mº Peralta, Ramón Artigas, Manuel de
las Heras y J.L.Caurel. Escalada poco frecuentada pese a su evidente trazado,
por su escaso atractivo y roca discreta en ocasiones. Recorrido poco equipado
para el qué serán necesarios los fisureros, aliens y unos 8 clavos variados.
2- Ariadna (200 m 6a). 1ª asc.: año 93 por J.Lozada, Àngel Vedo, Pep Forés y J.Soler.
Itinerario bastante equipado con parabolts, que descubre un trazado más
interesante y exigente con respecto al anterior, pero a tramos con la roca
bastante mediocre. Ruta con un ambiente totalmente diferente al estar situada
sobre el contrafuerte boscoso que limita la pared por su margen occidental.
Llevar fisureros y friends al gusto.
3- Seira (220 m 6a). 1ª asc.: 21-IX-85 por David Jutglar, J.Mª Peralta y Ángel
González. Con las mismas características que los trazados anteriores, esta ruta
gana progresivamente la verticalidad de este sector poco solicitado, para
situarse bajo los techos dominantes y evitarlos por la derecha. Cuarta tirada
destacable por su dificultad y roca mediocre, con bloques inestables enganchados
en el diedro. Llevar 8 pitones y el juego de friends al gusto.
4- Promio-Moreno (310 m 6b/A2 o 7b+). 1ª asc.: 15-VI-80 por Eric Promio y Josep Lluís
Moreno. Itinerario clásico y variado, con un sinuoso trazado prácticamente
equipado con parabolts y clavos, que sortea inteligentemente en libre las
debilidades de este sector de la pared. Quizás la entrada a la vía sea el tramo
más comprometido y obligado con respecto al resto. El pasaje de A2 (pitonado)
de puede forzar en 7b+. L9 expuesto. Llevar fisureros y los camalots hasta nº2.
Muy recomendable y rápida.
5- Trópoma (320 m 6c/A2+). 1ª asc.: 29-IV-84 por “Pinki” y Jesús Gálvez. Itinerario
prácticamente equipado con buriles y clavos salvo el tramo de A2+ del tercer
largo. Ruta muy variada con unas tiradas centrales dignas de mención (L5-L6-L7)
especialmente elegantes y nada habituales en esta pared. Roca buena en conjunto
excepto los largos finales. Poco repetida. Llevar unos 6 clavos, un bong
mediano, ganchos, fisureros y el juego de camalots hasta nº3. Recomendable para
mentes todo-terreno.
6- Hakuna Matata (300 m 6c+/A3). 1ª asc.: 12-IV-95 por Sílvia Vidal y Pep Masip “Nifo”.
Moderno trazado en escalada combinada qué aprovecha escrupulosamente los monolíticos
muros del sector. Muchos pasajes en libre han sido forzados posteriormente.
Semiequipado con 34 espits. Llevar unos 20 clavos variados, 10 plomos, ganchos,
aliens, microfisureros y el juego de friends hasta nº2. Prever un vivac (cómodo
en una cueva por encima de la R4). Para expertos en el tema.
7- Génesis (430 m 6a/A3). 1ª asc.: 28-V-83 por “Pinki” y Jesús Gálvez. Seis tiradas
muy evidentes abiertas en antaño, son aprovechadas por esta acreditada cordada
madrileña para resolver el resto de la jugada sin ningún tipo de expansión. A
partir de la R6 la cosa cambia radicalmente mediante una escalada combinada al
límite de la intuición y donde el terreno ofrece la mejor calidad. Pocas
repeticiones. Calcular una jornada intensa desde la feixa. Llevar unos 7
pitones variados, un bong, ganchos, 3 chapas recuperables, juego de aliens,
fisureros y camalots hasta nº2. Para asiduos a la pared.
8- New Age (400 m 6b+/A2). 1ª asc.: 29-IV-90 por Marc Arbós, Xavier Buxó y Luis
Alfonso “Luichy”. Itinerario bastante equipado con espits y parabolts (8mm) que
supera directamente la tapia hasta enlazar en plena travesía de la Galí-Molero.
Destacar L8 y L9 por su estética y buen ambiente. Roca buena en general
exceptuando la sexta tirada en travesía. Existe un antiguo proyecto de entrada
con buriles a la derecha. Llevar 4 pitones variados, 1 gancho, fisureros, algún
plomo y friends hasta nº3. Recomendable y bastante repetida.
9- Júper (325 m 6b+/A4). 1ª asc.: 26-III-95 por Pere Campanera y Julián Mármol.
Poca broma para este laborioso y expuesto trazado abierto con la utilización de
más de 40 plomos. Cuenta además, con tres largos en libre exigente equipados
con espits, y faena garantizada para dos jornadas. Llevar 20 clavos variados,
cuñas de madera para falcar, tacos, ganchos y unos 40 plomos según sus
aperturistas. Para fanáticos todo-terreno.
10- Galí-Molero (480 m V+/A1). 1ª asc.: 2-II-71 por Ramón Galí y Julià Molero. La gran
clásica de Roca Regina gracias a su dificultad más asequible y sobre todo por
su generoso equipamiento a base de parabolts y sólidos clavos. Con todo ello
encontraremos una roca excepcional pero pulida en conjunto, dada su gran
frecuentación con respecto al resto de itinerarios de la pared. Posible forzar
bastante en libre. Equipada para rapelar. Llevar los fisureros, cordinos y
friends hasta nº3. Muy recomendable cómo primer contacto con la pared. Bastante
frecuentada.
11- Maldita sea mi suerte (410 m 7b+/Ae). Equipada por David Brascó, Alexis Forcada, Luis Alfonso y
Xavier Buxó (17-IV-94). Itinerario prefabricado que supera directamente a la
izquierda de la vía Pere Camins, aprovechando los últimos 80 m de ésta.
Totalmente equipado con parabolts, ofrece el grado en libre más sostenido y
duro de toda la pared con diferencia. El desplome del L3 puede resultar lo más
extremo con una dificultad no inferior al 7c+. Hasta la feixa encontraremos
algo de musgo y algún canto dudoso, el resto homologado con una roca de buena a
excelente. Llevar 18 cintas.
12- Taj Mahal (410 m V+/A1). 1ª asc.: 12-IX-81 por José Mª Peralta, Xavi Vidal, Josep Mª
Codina y Juan Carlos Serrano. Interesante escalada combinada que aprovecha
todas las debilidades de un sector con roca generalmente buena. Bastante
equipada con buriles y pitones, en la que serán útiles 6 pitones variados, un
gancho, 2 plaquetas recuperables, juego de fisureros, cintas largas y friends
hasta nº2,5. Atención a un desprendimiento a mitad del L3 por encima de la
feixa dónde puede faltar algún anclaje. Bastante repetida en antaño.
Recomendable.
13- Pere Camins (430 m 6a/A1) . 1ª asc.: 13-II-77 por Juan López, Antonio García Picazo y
Nacho Ruiz. Posiblemente la más bella escalada de la Regina por su calidad y
acertado recorrido totalmente reequipado con parabolts. Mientras la
característica cicatriz distingue la parte inferior, a partir de la feixa unas
tímidas fisuras conducen a un festival de placas y regletas con posibilidades
de forzar con dificultades no inferiores al 7c. Llevar 16 cintas, un gancho,
fisureros y friends hasta nº 2,5. Muy recomendable y solicitada en cuestión.
14- La Festa del Paca (410 m 6a+/A3). 1ª asc.: 14-III-94 por Jaume Clotet “Paca”. Ruta
predominantemente artificial semiequipada con un buen número de espits, donde
habrá que navegar en técnica combinada empleando un día intenso o un par de jornadas
en plan más tranquilo. Llevar unos 12 pitones variados, 2 bongs, ganchos, 5
plomos, falcas de madera, los aliens y friends hasta nº2 (posible vivac con
hamacas en R8). En la ruta encontraremos gran parte de los plomos colocados
(15/20). Las reuniones son en general incómodas. Pese a todo la vía de “Big-wall”
más solicitada de Regina.
15- Gwendal (450 m 6a/A2). 1ª asc.: 15-III-83 por Jesús Gálvez y Félix de Pablos. Ruta
muy bonita en todo su desnivel, con un trazado muy inteligente y acertado.
Constatar que los 8 primeros largos ya estaban abiertos en el 82 por Félix,
Guillermo y “Nano” de Madrid. En la actualidad es una de las joyas más
preciadas de la pared después de la vía
Pere Camins, mucho más asequible en conjunto. Semiequipada con el material
original (buriles y clavos). Se puede forzar mucho en libre y apurar el
pitonaje colocando microfriends o aliens. Roca muy buena en general. Llevar los
fisureros, micros/aliens, friends medianos, un gancho y unos 6/9 clavos
variados (apurables con un poco de gesto). Horario: 8-10 h. Exigente pero muy
recomendable.
16- Arkalis (420 m 6a/A3). 1ª asc.: otoño del 84 por Félix de Pablos y Jesús Gálvez.
Ruta de envergadura con las repeticiones contadas. Audaz itinerario que supera
directamente la pared al genuino estilo “Big-wall”, destacando las tiradas
centrales sobre la feixa cómo las más laboriosas y expuestas con diferencia, a
causa de su terreno bastante mediocre con algunos pasos “expanding”. Semiequipado
con 31 buriles y 7 clavos. Llevar unos 25 pitones variados, 2 ganchos, 2 bongs,
falcas de madera, fisureros, cordinos, friends hasta el nº3 y algún plomo.
Prever 1 o 2 vivacs.
17- Thor (430 m 6a/A3). 1ª asc.: otoño del 85 por Jesús Gálvez y Félix de Pablos.
Gran ruta de las mismas características que la anterior pero más dura en
general, destacando siete tramos de A3 por equipar y roca bastante mala en los
dos largos por encima de la feixa. Semiequipada con 32 buriles y 9 clavos.
Llevar 20 pitones variados, ganchos, falcas de madera, juego de fisureros,
friends y un par de tornillos (8mm) con chapas. La vía tiene algún espit
añadido. Prever de 2 a 3 días de escalada, con vivacs de hamacas en R4 y R9.
Muy pocas repeticiones. Para expertos en el tema.
18- Anasazi (450 m 6c/A4). 1ª asc.: 1-VI-93 por Pep Masip “Nifo” en solitario.
Itinerario eminentemente técnico y laborioso en todo su desnivel, que cierra el
trio fundamental de escaladas más tremendas de la Roca Regina. Ambiente severo
y roca muy discreta en el segundo tercio. Destacar un tramo muy expuesto
sorteado con plomos sobre la feixa y el trampolín final por el exterior del
gran dado característico situado en lo alto de la muralla. Llevar de 30 a 35
pitones variados, ganchos, 15 plomos, pitonisas, falcas de madera, rurps,
friends y microfriends. Calcular un vivac en R8 previo equipamiento de los
primeros largos. Pocas repeticiones.
19- Aniversario (350 m V+/A2). 1ª asc.: 19-III-77 por José Antonio Vicente, Jordi Jutglar,
Ramón Artigas y José Mª Peralta. Recorrido muy evidente, aéreo y atractivo,
pese al rústico equipamiento de la época (buriles y clavos). Antaño era el
itinerario más repetido después de la Galí-Molero por su moderada dificultad y
aceptable calidad del terreno. Máximo oblig.: V+. Llevar algún clavo opcional,
un gancho útil, unas 7 chapas recuperables, los fisureros y friends medianos.
Recomendable aunque con pasajes delicados.
20- Barrufets (350 m 6a/A2). 1ª asc.: 10-VII-78 por Remi Brescó, Xavi Pérez Gil, Jordi
Camprubí y Albert Gómez. Bella escalada con buen ambiente y gran variedad de
pasajes, que sortea la zona más tétrica de la muralla dominada por el color
rojizo de los desplomes. A pesar de todo ello, solo cabe resaltar un segundo largo
descompuesto, que destaca claramente del resto mucho más humano y con mejores
posibilidades de protección. Prácticamente equipada para los que van sobrados, aunque
lo normal será clavar algún paso aislado. Llevar un bong mediano, 1 uve, 1
universal, 2 chapas recuperables, fisureros grandes y friends hasta nº2. Del
todo recomendable y diferente al resto de las vías de la pared. A estas alturas
posiblemente se encuentre reequipada con parabolts.
21- Ball de Rams (370 m 6b/A2). 1ª asc.: 31-III-85 por Jordi Muñoz, Pepe Pinar, Alx
Baldillou, Joan Olivé y Josep Lluís Sasot. Recorrido comprometido y depurado
que ofrece una primera mitad en escalada combinada sobre roca bastante
mediocre, y una segunda parte más libre aunque poco equipada. Destacar la
entrada y la salida de la R3 en terreno aéreo y desplomado, la sucia canal del
L5 y la precariedad del L8. Difícil abandono a partir de R3. Llevar 15 clavos
variados, fisureros y el juego de friends. Alguna repetición. Para asiduos a la
pared.
22- Arnau Vedo (355 m 6a/A2). 1ª asc.: 9-XII-08 por Àngel Vedo, Ramón Bartra y Nacho
Florenciano. Una de las últimas rutas abiertas en Roca Regina con predominio de
escalada artificial, pues discurre por el corazón de los desplomes al estilo
Big-wall atravesando por lo sano la vía Barrufets. Cuenta con unos 60 parabolts
de 8m/m y un clavo repartidos por todo su desnivel y las reuniones
perfectamente montadas con 3 parabolts de 10 m/m cada una. Llevar unos 40 pitones
variados, un juego de fisureros, y un buen surtido de aliens y friends.
Calcular un vivac cómo mínimo para una cordada rápida, preferentemente en R5 o
R9. Posibilidad de forzar en libre algunos tramos muy buenos con chorreras en
la parte superior (L11). Para asiduos a la pared.
23- Tudiguembú (340 m 7a/A3). 1ª asc.: 7-V-94 por Albert Castellet y Ernest Bladé con la
colaboración de Araceli Segarra. Ruta abierta y apurada posteriormente con una
dificultad máxima obligada de 6a/A3. Semiequipada con 65 espits. Para los
largos en libre tan solo hacen falta los fisureros y alguna cinta larga para
sabinas. Para el artificial serán necesarios unos 15 clavos variados (1 bong),
ganchos y un friend del nº2. Poco repetida con un primer largo descompuesto.
Existe la posibilidad de encadenarla toda en libre entrando por la vía
Postmortem hasta la R5, y en 45 m de travesía (6a), alcanzar la R5 de la
Tudiguembú. Una buena ocurrencia denominada Integral 20 Octubre realizada por
J. Sánchez y J. Samsó (2011). Para ello serán necesarias unas 16 cintas,
fisureros y un alien de color calabaza.
24- Mika Duran (255 m 6b/A3). 1ª asc.: Àngel Vedo y Víctor Sans en 5 días de mayo-14, con
la colaboración de O. Álvarez, A. Cogul, “Chapi” y Pepe “el Chino”. Última
apertura en Roca Regina dedicada a Miquel Duran tristemente fallecido a finales
del 2013. Se trata de un itinerario semiequipado con 43 parabolts, 10 plomos y
3 clavos (reuniones montadas), que aprovecha un antiguo proyecto aparcado a la
izquierda de la vía Postmortem y en siete laboriosas tiradas alcanza la arista
E. Llevar unos 60 pitones variados, 4 ganchos y un juego completo de friends.
Los autores calculan 2 jornadas intensas para una próxima repetición.
25- Postmortem (200 m 6c). Equipada por Francesc Panyella, Enrique Pérez y Francesc Sunyol
(7-IX-86). Primer itinerario equipado por arriba en la Roca Regina dado el
influjo de la escalada deportiva en la vecina pared de les Bagasses a medianos
de los 80. Escalada libre de gran ambiente con roca aceptable en su primera
mitad y genial el resto. Dificultad máxima obligada de 6a+. Llevar 11 cintas. A
la salida encontraremos el camino de bajada.
26- Nomrallys (170 m Vº/A3). 1ª asc.: 6-IV-14 por Jaume Clotet “Paca”. El nombre es una
crítica en alusión al rally de escalada que se celebra cada año en el congosto.
Escalada de corte artificial, que amortiza el espacio libre correspondiente
entre dos rutas equipadas, para disfrutar de la progresión sin llegar al límite
pero con solo 12 expansiones de progresión. Llevar unos 40 pitones variados,
fisureros, ganchos, camalots hasta nº3 y 6 chapas recuperables. Destaca el L1
como lo más exigente (A3) dada la nefasta calidad del terreno por encima del
pie de vía (feixa).
27- La Vida en el Filo (160 m 6c+). Equipada por Toni Saelices, Miguel Ángel Golvano, Xavi Metal
y Paco Sanglas (11-IV-87). La segunda vía equipada desde lo alto en la Roca Regina,
con las mismas características que la Postmortem pero quizás algo más exigente
de grado (6b obligado). Lo mejor son las tres últimas tiradas. Equipada con
espits. Llevar 15 cintas. Recomendable.
28- Olimpia (150 m V+/A2). 1ª asc.: 15-X-80 por Manolo Martínez y Nacho Ruiz. Ruta
mítica, lúgubre y poco equipada, a pesar de tener el trazado más lógico del
sector oriental de la pared. Roca mediocre y escalada obligada en general. Se
desconocen repeticiones. Llevar unos 20 pitones variados, falcas de madera,
juego de fisureros, friends medianos y 4 chapas recuperables. Para mentes
todo-terreno.
29- Alvar Archilla (140 m 6c/A2). 1ª asc.: 25-X-08 por Nacho Florenciano, Roger Archilla y
Robert Massana. Moderno trazado semiequipado con 41 espits que aprovecha lo
mejor de este sector, mediante una escalada artificial de entrada que conduce a
la sinuosidad de un terreno que mejora progresivamente con la altura,
ofreciendo unos tramos en libre con una dificultad máxima obligada de 6a.
Llevar 20 cintas, 5 uves, 5 universales, juego de aliens y camalots hasta nº2.
Reuniones con argollas.
30- Arista Ribes-Vidal (345 m V+). 1ª asc.: 22-X-72 por E. Ribes y J.Vidal. Elocuente itinerario,
el más asequible de Roca Regina a primera vista, que recorre la marcada arista
E que delimita la pared. En su conjunto la parte baja tiene poco interés,
mientras que sus cuatro últimos largos concentran su mayor continuidad y
atractivo. Llevar fisureros y friends al gusto. Encontraremos 2 parabolts y un
buril al inicio de la vía a la derecha de un desplome rojizo característico.
Relativamente frecuentada.
EL PELADET
- Frente a la apabullante Paret de les Bagasses, el Peladet aparece como leal
cómplice mostrando su estética vertiente oeste punto y final del Montsec de
Rúbies occidental, Un claro ejemplo de amolada estructura que da el nombre a la
sierra. Desde su cumbre, el extraordinario panorama revela insólitas imágenes
del congosto apreciando su belleza y magnitud real. Al contrario de Terradets,
el Peladet invita a la aventura apartándose del asfalto y de las miradas de
asombro del personal. Quizás sea esta una de las posibles causas de marginación
de este monolítico sector definido por enormes muros, escasas fisuras y sin feixas
que rompan el misterio. La evolución de la escalada en esta pared,
relativamente moderna, difiere claramente con respecto a Terradets o Roca
Regina mucho más amortizados por el afán aperturista. La fiebre del “free
climb” de los 80 arrasó los principales muros de las Bagasses entregando el
relevo a la espléndida Roca dels Arcs en Vilanova de Meià. Entre tanto y en
cuentagotas, una a una aparecieron tímidamente las líneas del Peladet
destacando como no la vía Destellos equipada en el 82, anticipándose al tiempo
por su categoría y extrema concepción. Salvo las paralelas a ésta, el resto de
los itinerarios de la pared han seguido un estilo diferente explorando desde
abajo los puntos débiles de la muralla en escalada libre principalmente. Una
pequeña reserva al margen de la moda de los equipamientos, suficientemente
amplia para cautivar a un público más versátil en proyectos que no sobrepasan
los 200 m. De todas maneras, el Peladet siempre será una clara alternativa a
los anfitriones del congosto, Regina y Bagasses, las máximas autoridades de la
zona por su peso histórico con itinerarios de todos los gustos y desniveles.
HISTORIA
- Todo empieza con la vía de Verano a primeros del 79 a cargo de Sergio Martínez, Conrad López y los malogrados Ignasi Ruiz “Nacho” y Manolo Martínez, una buena saga procedente de los famosos Piratas barceloneses. Terradets cuenta con tan solo ocho itinerarios y Roca Regina con seis; la vía CADE, la Reina-Puig y la Galí-Molero representan la trilogía principal de objetivos y el Peladet un pintoresco decorado que cautiva todas las miradas pero no el interés. A un buen roquero como Francis Thomas no se le escapa la oportunidad y junto con Gerard Uzabiaga trazan la vía de los Franceses (80), quizás la línea más definida y directa que recorta la pared oeste del Peladet. Otra inquieta saga -los de Tarragona- formada por Ricard Castellví, Quico Magrinyà y Jordi Besora abren sin pena ni gloria la vía del Escurçó a medianos del 81. Una vez prendida la mecha del equipamiento masivo en la Paret de les Bagasses y tras el diseño de la famosa vía Colores a cargo de Sergio Martínez, Julio Valera, J.C.Aldeguer “Pato”, Conrad López y Josep A. Macau, al trío de Sergio, Julio y “Pato” se les ocurrirá la brillante idea de equipar la Destellos (mayo-82), posiblemente la primera vía larga graduada de 7º grado del país, y justamente por el muro más arrogante del Peladet. Además del grado, el gusto y la estética fueron conceptos muy arraigados a los aperturistas de finales de los 70. Básicamente la actividad en el congosto provenía de los pocos afortunados montados en cuatro-latas (Renault 4-L) como Lluís Agustí “Pana”, Ramón Artigas, Lluís Giner y Pelayo Secorum, que dedicaron el 5º trazado abierto en esta pared a la memoria de Jordi Jutglar accidentado mortalmente en el macizo del Pedraforca. El año 84 será el año más prolífico de la muralla con 3 nuevos itinerarios: la vía dels Llops rapinyaires, Maragda y Empacho de Garnacho, esta última emulando el proyecto de la Destellos en el sector protagonista del ámbito deportivo. El “free climbing” desaparecía dejando paso a la escalada meramente deportiva, una idea importada del Verdón que rápidamente cuajó en el Montsec por su clara similitud calcárea. Al bullicio de Terradets sobrevino la calma y el nacimiento de multitud de escuelas deportivas cercanas a los núcleos urbanos. En el 85, Santi Llop y Carlos Molina abren a sus anchas la vía Crucis cerrando así una primera etapa del Peladet. Después de 8 años de abandono, a finales del 93 la vía Necròpoli corresponde a las horas de gimnasio y puesta a punto de sus autores: Albert Gómez, Pau Tetua y Paco Vargas, un nuevo equipamiento sin llegar a los límites del siguiente proyecto, la Baby Boom, las puertas del 8º grado en el congosto gracias a Joan Solé, Pep Forès, Àngel Vedo y Jaume Soler (marzo-94). A partir de aquí el estilo clásico de impone con cinco itinerarios de dificultad bien definidos: Blade Runner, Black Crowes y vía del Chema gracias a Sergio Farré y cía, la vía Nostálgia de Joan Altimira y la Aumella amarganta de Eduard Sánchez, seguramente el más laborioso de todo el repertorio. A estos dos últimos trazados abiertos en solitario se le suma una Festa del Paca de Jaume Clotet (2001), que posiblemente será una de sus fiestas más solicitada por su acierto y asequible dificultad. A partir del 2004 el fanático escalador de Reus, Albert Salvadó y cía, sentenciará con 7 nuevas vías los mejores espacios disponibles de la muralla, siempre por abajo y forzando un grado en libre semiequipado muy respetable. Sin lugar a dudas la campaña más destacada en pro de un estilo acorde con los nuevos tiempos.
ESCALADA
- La característica principal del Peladet es qué la horizontal no existe,
casi siempre progresamos sobre un cuadro torcido. Las típicas rayas del Montsec
aparecen aquí inclinadas generando unos movimientos más complejos tanto el
libre como en escalada artificial. Las vías totalmente equipadas gozan de un
terreno excelente con el típico pulido de los pasos clave en especial la
Destellos. En el resto de los itinerarios encontraremos la roca más variable
con tramos rojos mediocres en plan Montrebei hasta planchas grises súper-monolíticas.
Exceptuando las vías deportivas, para los itinerarios todo-terreno serán
necesarios los pitones y demás, destacando que algunos abandonos son
técnicamente complicados y en caso de retirada habrá que renunciar a algún que
otro clavo para seguir bajando. Pese que a simple vista la pared está bastante
limpia, el sector central ofrece unos tramos herbosos considerables, sobretodo
en la vía del Chema y algún que otro pasaje de la vía Crucis. A la derecha de
la vía de los Franceses es dónde gozaremos de mayor ambiente ya qué a partir de
la mitad, el Peladet de desploma paulatinamente hasta la cresta final. Los
pocos trazados de artificial, por lo general se encuentran desequipados y hay
que llevar el material de rigor descrito en la reseña.
Por la orientación de la vertiente (W) calcular sombra hasta las 13.00 h.
En pleno invierno es poco recomendable la escalada por su escaso horario de
insolación, mientras que en verano podemos amortizar media jornada si no nos
encantamos. Como es habitual, la mejor época es la primavera y el otoño. Llevar
agua suficiente en todos los casos. Todos los itinerarios de efectúan en el
día, quizás para la vía Aumella amarganta sea necesario un vivac o previo
equipamiento por sus características más bigwaleras. Para dormir al pie de
pared habrá que improvisar bastante según el sector, cuanto más arriba peor.
APROXIMACIÓN Y DESCENSOS
- El acceso desde la carretera es evidente y está bastante marcado hasta el
pie de la vía Destellos (unos 15 min). Siguiendo por la base de la pared
llegaremos al resto de los itinerarios (hasta 1 h). Para las rutas más alejadas
existe la posibilidad de acceder por la gran feixa inferior mucho más
transitable en general siguiendo pequeños canchales. En todos los casos será
necesario superar la malla metálica al margen de la carretera por el sitio más
idóneo.
- El descenso a pie (poco recomendable) se realiza por detrás de la arista
cimera bajando por el bosque en diagonal a la derecha hasta alcanzar el eje del
torrente norte con acusada pendiente. Seguiremos el curso hasta que la
vegetación desaparece y montaremos un rápel en un buen árbol que nos situará
sobre el gran talud de la carretera. Desde lo alto de la malla metálica habrá
que montar otro rápel o bien destreparla con precaución. Calcular de 30 min a 1
h según la vía. Descenso penoso y antipático en general.
- Si optamos por rapelar por la pared, lo mejor será dirigirse a la salida
de la vía Destellos dónde un cable nos conducirá a la primera instalación. En
caso de escalar alguno de los itinerarios más altivos, tenemos la opción de
remontar la cresta buscando el mejor trazo, hasta localizar un gran hito que
señala el inicio del descenso (Pas del Llop) por unas evidentes viras hasta la
base, contorneando seguidamente la pared hasta alcanzar las feixas de la
aproximación (1 h larga).
ITINERARIOS PARET DEL PELADET
1- Jalea Real (140 m 7a). 1ª asc.: 2-5-10 por Albert Castellet, Diana Calabuig,
V.Contino, Albert Salvadó y Vicenç Ruiz. Ruta exigente en la que destacan sus
dos primeros largos por un frontón más que vertical con una dificultad de
obligada de 6c+, en donde restan la mayor parte de los 23 parabolts utilizados
en la ascensión. Atención a los dos primeros chapajes. Grado aproximado con 2
pasos de Ae en el L2 y uno de gancho en el L4 (o7b+). Llevar 12 cintas, juego
de fisureros y aliens al gusto. Doble cuerda útil en L1.
2- Chaperos (145 m 7a). 1ª asc.: primavera del 2008 por Joan Capdevila, Albert
Salvadó, Emili López y Sandra Rabassa. De las mismas características que el
itinerario anterior pero quizás algo más asegurada con parabolts 10 mm. Los dos
primeros largos estan totalmente equipados aunque el segundo es algo expo. Vía
rápida y bonita en la que conviene ir suelto en 6b. Llevar 12 cintas, cordinos,
fisureros, aliens (rojo, amarillo y verde) y camalots hasta nº2. Posible
descenso mediante 3 rápeles (41+35+40 m).
3- Necròpoli (180 m 6b+). Equipada por Albert Gómez, Pau Tetua y Paco Vargas en
noviembre del 93. Una vez superado el primer largo de la Destellos esta vía
atraviesa a la izquierda para situarse paralela a la Empacho de Garnacho. Se
trata de un trazado que en general de aparta de la lógica a favor de unos
buenos muros para forzar grado, siendo el más asequible del repertorio
deportivo aunque con algún aleje. Totalmente equipado con parabolts. Llevar 15
cintas. Recomendable.
4- Destellos (200 m 7b). Equipada por Sergio Martínez, Juan Carlos Aldeguer Pato y Julio Valera en mayo del 82.
Extraordinaria escalada en placa de fama garantizada, que discurre por la línea
más estética que posiblemente ofrece la pared del Peladet. El ataque de sitúa
en el extremo izquierdo de la marcada barrera de techos, dónde subidos a un
gran bloque característico descubriremos el primer parabolt de la vía y el
acusado pulido del terreno. Llevar 15 cintas y contar con una dificultad
obligada de 6b. Es habitual rapelar por sus buenas instalaciones.
5- Empacho de Garnacho (185 m 7a). Equipada por Miguel Ángel Atance y J. Pereira en octubre del
84. Magnífica escalada en placa que aprovecha el primer largo de la Destellos
para continuar de forma elegante y directa hasta la cima. Equipada totalmente
con espits, con un grado obligado de 6b+ y seguros alejados, llevar 10 cintas.
Rapelable. Realizando los dos primeros largos en uno resulta 7a+. En la parte
alta encontraremos algunos espits dobles curiosamente unidos con cable.
6- Vía de les Pubilles (180 m 7c). Abierta por Àngel Vedo, Nacho Florenciano y Roger Archilla a
primeros de diciembre del 09. Escalada totalmente equipada con parabolts con
una dificultad más forzada (6c+ obligado), en la que destaca un penúltimo largo
cotado de 7c como uno de los más extremos del repertorio. Llevar 20 cintas, un
gancho y los estribos por si acaso.
7- Baby Boom (200 m 8a). Equipada por Joan Solé, Pep Forès, Àngel Vedo y Jaume Soler en
marzo del 94. Itinerario excelentemente equipado con parabolts con un primer
largo en desplome a considerar, y un penúltimo graduado de 8a que posiblemente
sea el más difícil en libre de toda la pared (6c obligado). Llevar 16 cintas.
8- Maragda (200 m 7a). 1ª asc.: 19-2-84 por Josep Lluís Moreno, Jordi Verdaguer y el
malogrado Xavier Rodríguez. Itinerario abierto por abajo hasta la R4 y
posteriormente equipado desde arriba, que en ningún caso se trata de un trazado
deportivo aunque la graduación lo parezca. Aprovecha el mejor terreno a la
derecha de la Destellos y cuenta con unos viejos buriles, correctos pero en
ocasiones mal ubicados, qué le dan un carácter más auténtico e impresionante al
asunto. En plan deportivo llevar camalots hasta el nº2, los fisureros (pequeños/medianos)
y el juego completo de micros. Al estilo clásico sumarle unos clavos variados y
el gancho.
9- Satèl·lits del desig (205 m 7a). 1ª asc.: mayo 2004 por Albert Salvadó y Jordi Artigas. A
partir de la característica laja de la tercera tirada de la vía Maragda,
arranca esta alternativa con roca estupenda, que supera por la izquierda el
primer espolón que domina la pared. Vía semiequipada con espits y clavos, en la
que serán muy útiles los fisureros, camalots hasta el nº3, 12 cintas y un
gancho con estribo si no dominamos el 6c. Seguros alejados en L3 y L4.
10- La Festa del Paca (190 m 6a/Ae). 1ª asc.: 19-3-01 por Jaume Clotet “Paca” en solitario. Uno
de los itinerarios más solicitados del Peladet por su modesta dificultad, acertando
la lógica y huyendo de las grandes placas. Escalada prácticamente equipada con
buriles y espits, que tras un primer largo de trámite, de desenvuelve por el
lomo del espolón para culminar por un bello diedro tipo Montrebei. Máximo
obligado: V+. Llevar 14 cintas, 5 chapas recuperables y camalots hasta nº2.
Recomendable y rápida.
11- La revolta dels Nyerros (170 m 6a/Ae). 1ª asc.: 29-4-06 por Gemma y Rodo. Escalada prácticamente
equipada con parabolts con reuniones rapelables, en la que destaca la tirada de
entrada, un estupendo L2 y la salida a la cumbre como lo más logrado, mientras
que el resto transcurre por zonas herbosas de poca calidad. Llevar unas 18
cintas largas, estribos y camalots hasta nº2.
12- Vía del Chema (170 m 6a). 1ª asc.: 31-5-97 por Jesús y Sergio Farré. Itinerario muy poco
equipado en el que solo encontraremos algunos clavos antiguos al principio y
poca cosa más, con la incógnita de no saber si ya se había escalado
anteriormente dado su lógico trazado. De todas formas ofrece una vía de
aventura dónde serán útiles 4 pitones variados, fisureros, micros y camalots
hasta nº3.
13- Absurdistán (200 m 6c+). 1ª asc.: 30-5-09 por Albert Salvadó, Vicenç Ruiz y Santi
Llop. Vía semiequipada con parabolts que aprovecha la entrada y las estupendas
placas situadas inmediatamente a la derecha del itinerario anterior, para
culminar por un frontón muy vertical donde aparecen dos largos que exigen dar
la talla con diferencia. Casi al final del último largo encontraremos el paso
más extremo evitable utilizando un gancho. Llevar los fisureros, juego de
aliens y camalots 1 y 2.
14- L’Avi de la mel (180 m 6b). 1ª asc.: mayo 2009 por Albert Salvadó, Félix Garrido y Vicenç
Ruiz. Vía muy bonita que combina las típicas placas con algunas fisuras en la
parte alta que rompen la monotonía de la ascensión. Contrasta el L3 por su
trazado poco acorde con la lógica, que obliga a progresar en dirección inversa
a las franjas de la pared. Escalada equipada con parabolts distanciados por lo
general, la mayoría añadidos posteriormente para alegrar la jugada. Llevar los
fisureros, aliens y camalots hasta nº2.
15- Samsara (195 m 6b+). 1ª asc.: septiembre 2009 por Luis Alfonso “Luichy” y Sidarta
Gallego. Itinerario bonito y variado pero con un inevitable L4 bastante sucio
que conduce a un evidente diedro naranja de salida, ciego y muy vertical en
cuestión. Las tres primeras tiradas ya estaban abiertas por escaladores de
Mataró, por lo que aún encontraremos los espits originales salvo el L2
totalmente reequipado con parabolts. Máximo obligado: 6a+. Llevar fisureros,
cordinos y friends hasta nº3,5 (3,5 repetido). Inicio subiendo a un árbol
providencial para salvar el desplome de entrada.
16- Vía Crucis (180 m 6a+/A2). 1ª asc.: 6-4-85 por Santi Llop y Carlos Molina. Itinerario
abierto en el día quedando prácticamente desequipado (solo un pitón en el tramo
de A2). El pasaje clave del L4 consiste en subir directamente hacia una mancha
blanca y atravesar a la izquierda hasta alcanzar una sabina. De desconocen
repeticiones. Llevar unos 10 clavos (V cortas y planos), un juego de fisureros,
un gancho y camalots nº2, 3 y 4. Abierta sin uso de expansión.
17- Mestre Llop (200 m 7a). 1ª asc.: primavera del 2011 por Unai Mendía, Albert Salvadó y
Diana Calabuig. Bonita vía con predominio de placas y algún paso rabioso poco
obligado, con un L3 y L5 atípicos con respecto a la tónica habitual de los
itinerarios del Peladet. Por lo general los parabolts se concentran en los
tramos más exigentes, algunos de los cuales fueron colocados posteriormente.
Llevar los fisureros, un gancho, un juego de Totem-cams, micros al gusto y
camalots nº2 y 3 opcionales.
18- Vía dels llops rapinyaires (225 m 6a). 1ª asc.: 4-2-84 por Albert Ibañez, Santi Llop y Josep Lluís
Sasot. Itinerario de aventura abierto en tan solo 6,30 h, en el que difícilmente
encontraremos algún rastro salvo un buril en el L2, y algunos clavos en la
tirada de salida coincidiendo con la vía del Escurçó. Escalada lógica y variada
que enlaza sinuosamente todas las fisuras que salen al paso. Algún tramo con
mala roca y vegetación. Destacar el L2 y el L5 cómo los más exigentes con algún
paso de A0 puntual. Llevar 8 pitones variados, fisureros y friends.
19- L’Escurçó (200 m V+/A1). 1ª asc.: 7-6-81 por Quico Magrinyà, Jordi Besora y Ricard
Castellví. Recorrido sinuoso y variado semiequipado con pitones y algunos
buriles, donde destaca un primer tercio por sugestivos muros, mientras que en
el último habrá qué colocar alguna pieza de progresión en un terreno mucho más
vertical y exigente. Parte central sucia y con vegetación. Llevar 6 clavos
variados, cintas muy largas, fisureros y friends medianos.
20-
Pájaros de Barro (170 m 6c+). 1ª asc.: mayo del 2012
por Albert Castellet y Albert Salvadó. Bonito itinerario sobre buena roca
exceptuando un tramo del L3, con un primer y último largo soberbios (6b
obligado). Semiequipado con 14 parabolts y 8 clavos, para lo qué serán
necesarios los fisureros, un gancho, 2 semáforos de Aliens, juego de Totem-cams
y C3 (rojo y verde). Aconsejable doble cuerda . Inscripción al pie de vía.
21- Vía de los Franceses (200 m V+/A1). 1ª asc.: 16-11-80 por Gerard Uzabiaga y Francis Thomas.
Escalada directa y muy lógica parcialmente equipada, cuya primera ascensión de
realizó en tan solo 12 h por esta ilustre cordada francesa. Inicio por un
compacto diedro a proteger en su totalidad. Roca buena en general excepto una
parte central poco agraciada hasta alcanzar la R3. La cuarta tirada es la más
laboriosa y dónde habrá que emplearse a fondo con unos 10 clavos y los
fisureros. Últimos largos con semblanza a Montrebei. Pocas repeticiones.
22- Nostalgia (170 m V+/A1). 1ª asc.: otoño-95 por Joan Altimira “Aranya” y Joan Franc
Pascual. Itinerario semiequipado con espits que aprovecha las debilidades del
terreno a la derecha de la vía de los Franceses, enlazando con ésta en el
penúltimo largo. Trazado asequible en conjunto exceptuando el L4 dónde hay qué
recurrir a la escalada combinada por un muro vertical dónde se concentran las
mayores dificultades. Llevar unos 10 clavos variados, los fisureros y cordinos
para puentes de roca. De desconocen repeticiones.
23- Aumella amarganta (210 m 6c/A3). 1ª asc.: primavera-97 por Eduard Sànchez en solitario.
Escalada prácticamente desequipada en la que solo encontraremos alguna pieza en
reuniones y 3 espits de progresión en el L4 (A3). Salvo esta tirada con roca
mediocre, el resto ofrece una calidad excelente con posibilidad de apurar en
libre hasta 6c. Destacar la exposición del L2 que resulta difícil de proteger.
Para próximas repeticiones llevar unos 20 clavos variados (plátanos, uves
recortadas y extraplanos), 3 plomos, ganchos, fisureros y friends. En la última
tirada de 55 m de puede montar reunión intermedia a la altura de un espit.
Posiblemente la ruta más laboriosa de la pared.
24- Vía de Verano (210 m V+/A2). 1ª asc.: 18-3-79 por Manolo Martínez, Conrad López, Sergio
Martínez y Nacho Ruiz. Una pequeña obra maestra del congosto y ruta pionera de
la muralla. Escalada técnica, atlética y del todo variada, que en ningún
momento regala nada. Los largos centrales exigen un buen dominio del
artificial, con solo 3 buriles de progresión en 25 m de pequeñas franjas a
equipar con puntas de clavos. Roca buena exceptuando en la fisura-diedro del
penúltimo largo. Ambiente garantizado hasta la cima. Llevar 10 pitones variados
(uves cortas y universales), alguna pitonisa, ganchos, fisureros y camalots
hasta el nº3. Abierta en 18 h de escalada con un vivac en pared.
25- Mar de Placa (180 m 7b+). 1ª asc.: 28-3-11 por Tronko y Pol. Moderno itinerario semiequipado
con 24 parabolts y 9 pitones (reuniones montadas), que exprime cada una de las
posibilidades de este sector ofreciendo seis largos en libre, con una
graduación provisional pendiente de confirmar. Roca buena en conjunto y algunos
tramos un poco expos, en la que serán muy útiles los fisureros, 12 cintas, 2
juegos de micros y camalots 0,75, 1, 2 y 4. Parte inferior con estupendas
placas y parte superior muy sorprendente hasta la cima con un ambiente más que
generoso.
26- Blade Runner (200 m 6a+/A2+). 1ª asc.: 22-10-94 por Sergio Farré y Emili López. Itinerario
elegante y atrevido en todo su desnivel con solo 8 clavos y 4 espits en tiradas
(reuniones semiequipadas). Destacan la calidad de la monolítica laja del L2, la
laboriosa progresión del cuarto y el mantenido muro del L5 que no perdona hasta
la cima. Para próximas repeticiones serán necesarios de 10 a 15 pitones
variados, 3 pitonisas, ganchos, fisureros y friends. Calcular de 6 y 8 h. Ambiente
tipo Montrebei con mucha verticalidad.
27- Jordi Jutglar (210 m 6a). 1ª asc.: 20-10-83 por Ramón Artigas, Lluís Agustí, Lluís Giner
y Pelayo Secorum. Escalada clásica prácticamente equipada con buriles y clavos,
que recorre una compacta y llamativa bavaresa de 40 m (L3) que sin lugar a
dudas es la guinda del pastel. Roca buena en conjunto salvo algún tramo roto en
el L2 y al final del itinerario. Destaca un corto destrepe en el L5 para
alcanzar un pequeño diedro que lleva a la reunión. Llevar los fisureros y camalots
hasta nº4. La vía no deportiva más repetida del Peladet.
28- Black Crowes (190 m 6a+). 1ª asc.: 3-9-96 por Emili López y Sergio Farré. Itinerario
abierto en tan solo 5 h aprovechando la lógica y el asequible terreno a la
derecha de la vía anterior. De todas maneras hay que destacar que la línea no
es ninguna maravilla y la roca menos. Solo un clavo abandonado en el paso clave
de la tercera tirada (6a+) y algún que otro puente de roca, es todo el material
que encontraremos aparte de los 4 buriles de la R4 de la Jordi Jutglar de la
cual se aprovecha. Llevar 3/5 pitones variados, juego de fisureros, cintas
largas y Camalots hasta el nº3.
29- Walkiries (150 m V+). 1ª asc.: 3-4-85 por Josep Lluís Sasot y Joan Olivé. Esta vía
no aparece en el dibujo panorámico porque está situada más arriba después del
espolón qué forma la pared. El primer largo de caracteriza por dos diedros
paralelos (coger el izquierdo V/V+), que conducen a una zona herbosa
inevitable. Desde aquí, un diedro principal ofrece dos bonitas tiradas de Vº
para salir por la derecha hasta la cima. Llevar 6 pitones variados, juego de
fisureros y friends. El descenso se efectúa por unas canales situadas a la
derecha del itinerario. Totalmente desequipada (un buril en R3).
LA ROCA DELS ARCS
- Una auténtica escalera vertical de calcáreo sobresale de los pequeños
valles próximos al rio Segre, arraigados a un terreno de secano de tradición
avícola y ganadera. Sus gentes, acostumbrados a un clima de contrastes, pasan
del verano abrasador a sumergirse bajo una espesa niebla durante semanas en
invierno por efecto de la inversión térmica. Pueblos que lentamente han
resucitado frente a la modernidad, contagiados por los forasteros de la gran
ciudad hambrientos de actividad al aire libre. Poco representaban las
escarpadas rocas para los lugareños salvo un pintoresco decorado para completar
la postal. No fue hasta primeros de los años 80 que la visita de los
escaladores se notó gracias a unos primeros itinerarios muy atractivos, la
comodidad de accesos, y la existencia de un viejo bar y un pequeño pajar para
dormir. Tímidamente aparecieron algunos croquis de la zona, pero la atención de
centraba en el vecino congosto de Terradets donde empezaron a equipar vías
desde arriba con la escusa del “Free Climbing”. Los comentarios de boca en boca
fueron perforando esa mina de oro sin dueño ni ley. Una verticalidad real de
200 m desplegada por un kilómetro y medio de fachada, delimitaba su creciente
interés semana tras semana. Una auténtica escuela se estaba forjando con la
nueva concepción de los 80 sin etiquetas ni vínculos que contagiaran la causa.
La gallina de los huevos de oro había llegado a Vilanova de Meià para bien de
muchos y recelo de otros, que nunca hubieran imaginado que aquellas
insignificantes rocas arrastraran a tanto personal hasta el punto de amortizar
una pared, una carretera y algo más. Actualmente es una de las escuelas
catalanas más solicitadas por todo tipo de escaladores, y una de las más conocidas
a nivel nacional. Quién no conoce la Roca dels Arcs no ha experimentado el
placer de subir por un espacio único, agraciado por sus agarres, y todo un reto
para los brazos, los protagonistas de la fiesta.
UN POCO DE HISTORIA
- El primer itinerario de la pared fue la vía Tàrrega abierta R.Balcells y
R.Reynal en el 74. Lejos de la vertical, la cordada discurrió por el sector más
asequible y evidente sin mayores pretensiones. Tres años más tarde, la vía
Lleida abierta por F.Campomanes, I.Melgosa y J.Giné del Centre Excursionista de
Lleida, y situada en el otro extremo de la muralla, rompe el hielo y aparece
publicada en la revista Vèrtex nº64 como una interesante gesta sorteando el
plomado sector. El trinomio se completa a primeros de los 80 con la vía del
Quatre en plena fachada principal, cuya atrevida e inteligente línea muestra de
la destreza de sus autores J.M.Guillaumet y S.Puig del GEDE de Barcelona. Del
mismo centro por aquel entonces, Pep Masip “Nifo”, toma el relevo y pese a su
limitada experiencia consigue el siguiente trinomio aprovechando las
posibilidades que poco a poco se desvelan: la vía Navarro junto con Felip
Sandiumenge, la vía Anaconda con Felip y J.Ll.Moreno, y la ruta más arrogante
de la pared, la Wild Planet con Pep Boixadós “Rosso”. Entre el 81 y el 82
aparecen los itinerarios más populares de la Roca dels Arcs: Necronomicón,
Camel, Rampas Invertidas y Musical Exprés entre los más representativos,
asentando las pautas de un terreno muy versátil para todo tipo de estilos y
dificultades. Con ello, la libertad total de equipar por arriba, abrir por
abajo, o simultáneamente, conduce a prescindir de toda ética para inaugurar con
rapidez y comodidad las líneas más llamativas que ofrece la extensa muralla que
no son pocas. Este fenómeno pronto precipita una invasión tal de personal que
llega a desbordar todas las previsiones, sorprendiendo a los lugareños que ven como
cada fin de semana de llena el bar hasta la bandera, y las cunetas de la
estrecha calzada del Pas Nou se convierten en un saturado parking sin precedentes.
Hasta ahora, las visitas foráneas al pueblo correspondían a los cazadores y
algún que otro buscador de fósiles, que ni mucho menos alcanzaban la magnitud
del fanatismo vertical. Aparte de roca virgen, Vilanova de Meià ofrecía el
mejor escenario para escalar en pleno invierno cuando en la mayor parte de las
escuelas el frío era inevitable. Por aquel entonces, Montserrat no disponía de
vías largas en la vertiente sur tal como conocemos hoy en día, y en Terradets,
por poner otro ejemplo, escalar en pleno mes de enero no era muy normal. A
partir del 82 el fenómeno de acentúa claramente, y la fama de Vilanova llega
hasta todos los rincones de la geografía nacional gracias a los artículos de
revistas y al boca a boca esencialmente. Se abren y equipan nuevas rutas para
la escalada libre siguiendo la tendencia de la pared de las Bagasses, y
paralelamente de incorpora la práctica del artificial, una asignatura olvidada que
unos pocos resucitan tras palpar la filosofía californiana, acorde con los
estribos y el arte de la progresión del “Big Wall” a menor escala. Con ello
aparecen las primeras vías de grado artificial provocando la jugada por lugares
inverosímiles por donde antes hubiese habido una insignificante hilera de
chapas. Vías como la Desequilibrio Mental, Deseos de Placer, Heidi, Bailando
con plomos y otras muchas afincadas en el vecino Pilar del Segre, consiguen
estimular a una minoría por la disciplina artificial y, además, atraer a muchos
colegas franceses a rivalizar con su técnica. Entre una y otra cosa, la Roca
dels Arcs resulta en pocos años todo un experimento, donde conviven rutas de
todo tipo amparadas por una comunión de estilos poco habitual, todo un
referente en el panorama nacional. En sólo una década (80-90), Vilanova deja un
saldo positivo difícilmente comparable, hasta que el grado deportivo como tal, desvía
la atención hacia otras zonas más pujantes devolviendo la tranquilidad a un Pas
Nou saturado palmo a palmo. Actualmente el interés por el escenario sigue
vigente con unos objetivos imprescindibles a toda costa, con una historia más
que intensa que confirma la magnitud del fenómeno, y con una repercusión sobre
el terreno que a simple vista podemos comprobar sin alejarnos demasiado del
vehículo.
ESCALADA
- Así pues, la Roca dels Arcs ofrece un extenso repertorio de itinerarios
dentro de las tres modalidades básicas: clásicas, deportivas y de artificial
extremo. Las clásicas, que vienen a ser las pioneras de cada tema, cuentan con
los pasajes más bellos y variados resultando del todo recomendables para estrenarse
en la pared. Las vías deportivas, al igual que sucede en Terradets, poseen un
parecido irremediable entre ellas ya que discurren por muros idénticos que
atraviesan la superficie más idónea para estos menesteres. No obstante, los
desplomes de Vilanova son todo un regalo para la progresión atlética de nobles
movimientos sobre una roca muy compacta en general, un gran placer que solo
ofrece esta escuela aparte de Riglos, Ordesa o el Peñón de Ifach principalmente.
En cuanto a las de artificial extremo hay de todo y más, desde columpios
colgados a 100 m de altura hasta danzas precarias a ritmo de plomos cerca del
suelo. Un terreno rico en expresión que ha demostrado un mayor interés aventurándose
desde abajo que al son del taladro. La calidad de la pared ha sido el anfitrión
indiscutible, ofreciendo las múltiples posibilidades que carecen a menudo
muchas áreas del Montsec: buenos agarres, pitonaje corto pero generoso, y
verticalidad constante sin vegetación.
APROXIMACIÓN Y DESCENSOS
- Una vez estacionados en la carretera del Pas Nou, tan solo hay que cruzar
un pequeño torrente y continuar subiendo hacia la pared por caminos bien
trazados. Para las vías más cercanas (Necronomicón) tardaremos unos 10 min,
mientras que para las más apartadas (Lleida) podemos estar unos 25 min de
cómoda marcha.
- El descenso lo podemos efectuar por cada lado de la pared según el
itinerario escogido. De la mitad hacia la izquierda poniendo como centro la vía
Wild Planet, es preferible dar el rodeo por el oeste para descender por una
amplia canal y proseguir cercanos a la pared para atravesarla por su base
dirección al Pas Nou (45 min). De la mitad hacia la derecha se baja siguiendo
por la cresta, hasta un punto donde el trazo toma orientación norte
precipitándose en dirección al Pas Nou (atención con el terreno mojado o con
nieve). Muchas vías están equipadas para rapelar, pero a la larga se tarda
prácticamente lo mismo que andando.
DATOS DE INTERÉS
- En Vilanova de Meià disponemos de colmados, panadería, bares,
habitaciones y hasta un refugio para acomodarnos (la gasolinera más cercana
está en Artesa de Segre).
- En el bar “Cirera” (entrando por la izquierda en la rotonda), existe
buena parte de la información necesaria (libros de reseñas), servicio de
comidas, habitaciones y hasta un pequeño stock de material de escalada por si
precisamos de algo (telf.: 973415081).
- Para coger agua tenemos varias fuentes en el pueblo, y saliendo en
dirección al Pas Nou encontraremos la Font de la Figuera (picnic) y algo más
arriba la Font Blanca.
- Para instalarse con la furgoneta o acampar, lo habitual es hacerlo en los
llanos situados por debajo de la Font de la Figuera.
- Además de la escalada podemos practicar el parapente si las condiciones
lo permiten, con dos campos de aterrizaje.
- Insistir en evitar la temporada veraniega para escalar porque
prácticamente no existen zonas a la sombra y terminaremos en la piscina del
pueblo. En invierno, si la niebla no sube a las paredes, la temperatura es muy
agradable en todos los sectores.
ITINERARIOS ROCA DELS ARCS
1- Tachin (200 m 6a). 1ª asc.: 12-12-82 por Juan Carlos Serrano y Joan Asín. Lógico
trazado situado en el extremo occidental cuando la pared pierde continuidad e
interés, en el que prácticamente no encontraremos nada salvo algún que otro
pitón, un buril a pie de vía y otro en la R2. Llevar los fisureros/aliens,
cintas largas y algún clavo opcional. Roca buena en conjunto. Poco repetida.
2- Sangre azul (140 m 6a+). 1ª asc.: 27-10 02 por Miguel Gómez, Gustavo Mañez y Roger
Olmos. Una versión más atractiva a la vía anterior utilizando un espacio más
propicio para disfrutar de una escalada en libre generosamente equipada con
parabolts, mediante tres largas tiradas bien aprovechadas hasta la feixa. Des
de la R3 de puede bajar en un rápel a la feixa inferior y continuar a pie hasta
el pie de la pared (15 min). Llevar 13 cintas.
3- La Cosa Nostra (170 m A1/6a+). 1ª asc.: 26-10-97 por Mariona Orfila, Dani Brugarolas y Edu
Requena. Interesante recorrido por muros con buena presa, dedicado en memoria a
Xavi Rodríguez, donde disponemos de una primera mitad bastante exigente con
pasaje de techo incluido y salida por unos muros de gran calidad, y una segunda
menos agraciada evitando al máximo los tramos con vegetación. Escalada prácticamente
equipada con parabolts (rojos) y algunos clavos. Llevar fisureros y aliens.
4- Bolero pervers (170 m 6b/A1). 1ª asc.: 7-3-93 por Vicenç Romero y Joan Wenceslao. Se
trata de una variante directa a la vía anterior, que mediante cuatro exigentes
largos salva un terreno muy monolítico y vertical, donde destaca una segunda
tirada combinada en la cual será preciso pitonar algunos pasos para superar el
desplome. Llevar 6 clavos, los fisureros, aliens y camalots medianos. No
confundir con una línea de espits situada a la derecha.
5- Rampes invertides (225 m 6a). Equipada por Josep Lluís Moreno y Emilio Hernández en
noviembre del 81. Uno de los itinerarios imprescindibles de la pared por su
acertada línea concebida desde abajo, con unos bellos pasajes que pondrán a
prueba nuestros brazos en los tres desplomes que salen al paso. Lástima que la
roca esté pulida en los tramos claves. Itinerario reequipado con parabolts, por
si acaso pueden ser útiles los fisureros/aliens para los dos últimos largos
comunes con la vía Lleida. Llevar 7 cintas.
6- Migranya Profunda (180 m 6c). Equipada por Joan Oliva, Guillem Arias, Manuel Pedro, Joan Freixas
y Jordi Briz (7-4-89). Itinerario generosamente equipado con espits, donde
encontraremos un destacable L4 que remata de la forma más perversa el
pronunciado desplome (Ae/6a obligado). Roca muy buena en general salvo en la
sexta tirada para llegar a la feixa. Llevar unas 15 cintas.
7- El Clan de los Chamanes (190 m 6c+/Ae). 1ª asc.: 9-9-95 por Joaquín Olmo, Erika Wellmer y Jesús
Martínez “Primo”. Itinerario totalmente equipado con parabolts de 12m/m cuyo
trazado se atreve por lo más aéreo del sector, después de superar un explosivo
primer largo que resulta lo más exigente de toda la vía con diferencia (6c+).
Más arriba aún habrá que apretar, sobre todo a la salida del desplome de la
tercera tirada. Dedicada a la familia de pastores del pueblo. Llevar 15 cintas.
8- Plaerdemavida (200 m 6c). 1ª asc.: 1-4-89 por Xavier Buxó y Luis Alfonso “Luichy”.
Itinerario un tanto rebuscado que aprovecha la roca más noble con una magnífica
placa en el L3 difícil de olvidar. A partir de la tercera reunión salva el corto
desplome de la vía Lleida y rápidamente de desvía a mano derecha por el
soberbio muro de la vía Migranya Profunda coincidiendo en los tramos finales
con ésta. Equipada, llevar 12 cintas y útiles los fisureros.
9- Lleida (200 m 6b+). 1ª asc.: 1977 por J. Giné, I. Melgosa y F. Campomanes.
Representa el primer itinerario de dificultad abierto en la Roca dels Arcs
después de la vía Tàrrega, por lo que ofrece el trazado más asequible y lógico
de este sector. Solo destaca la salida de la R3 como lo más exigente (máximo
obligado: Vº/A1), a partir de lo cual disminuye claramente la dificultad hasta
la cima. Atención a no confundirse con las vías vecinas. Reequipada con
parabolts y algunos clavos. Llevar los fisureros y 10 cintas. Una gran clásica
del Montsec.
10- Factor 2 (180 m 6a+/A2). 1ª asc.: 9-10-83 por Jordi Verdaguer, Cesc y Jordi Rosell.
Fue uno de los primeros itinerarios abiertos simultáneamente por arriba y por
abajo, gracias al cóctel de tendencias surgidas por el efecto Terradets. A
destacar la acrobática fisura del L3 donde será necesario pitonar algunos pasos.
El resto de la vía está prácticamente equipado con las chapas justas y
necesarias que denotan el rigor de sus autores. Llevar 4/5 clavos y los fisureros/aliens.
Entretenida y exigente.
11- Tierra de Nadie (175 m 6b+). Equipada por David Brascó, Francesc Pañella “Pany”, M. Ángel
Golvano y Luis Alfonso (13-9-87). Escalada de corte deportivo íntegramente
equipada con parabolts. Ofrece tres desplomes bien definidos donde hay que
apretar de brazos y una placa en el L2 donde tampoco se regala nada. R2 común
con Factor 2. Roca excelente y pulida en los pasos claves, salvo el último más
discreto. Llevar 12 cintas.
12- Montse Pueyo (185 m 6a+). 1ª asc.: 27-9-81 por Juan Carlos Serrano y Joan Asín. Otra
lógica opción que esta atenta cordada supo aprovechar, dejando impreso su
virtuoso estilo con solo 6 expansiones en todo el recorrido incluido reuniones.
Aunque su aspecto augura vegetación y tramos sucios, en verdad los sortea
inteligentemente ofreciendo una ruta de aventura muy interesante, variada, poco
equipada y con roca buena en conjunto, abierta en solo una jornada. Escalada
algo expo en comparación con los itinerarios existentes. Llevar fisureros, juego
de aliens y 4 clavos por si acaso.
13- El Somni de Químfer (170 m 6b+). Equipada por Rafel Bernat, Xavi Vallès, “Xente” y “Candro”
(junio-96). Se trata de una línea totalmente equipada con parabolts que se
cuela descaradamente entre las vías existentes con el aliciente de estar muy
asegurada, poseer buena roca, y en sólo cuatro largos liquidar la jugada. En
todo momento va muy próxima a la vía Montse Pueyo, incluso la llega a pisar en
un par de ocasiones. Llevar 15 cintas.
14- Pasajeros del Viento (170 m 7b). Equipada por Josep Escofet, Julio Solera, J. Tejada y Ramón
Artigas (5-3-89). Magnífico itinerario totalmente equipado espits, donde
destaca con mucha diferencia la estética del muro del cuarto largo, con el
tiempo forzado en 7b (6c/Ae). Llevar 12 cintas. Muy recomendable.
15- Papisuca (190 m 7a). Equipada por Francesc Pañella, Miguel Picallo, Enric Camacho y
Francesc Suñol (15-12-84). De similares características con el itinerario
anterior, donde también nos topamos con el explosivo techito del L4, poco canto
y mucha continuidad. De todas maneras el recorrido es más sinuoso y acierta
mejor las debilidades del terreno al estar abierto con anterioridad. Reequipada
con parabolts. Llevar 12 cintas.
16- Chispa (185 m V+/A2). 1ª asc.: 6-12-93 por Jérôme Thinieres y Dominique
Brau-Mouret. Auténtica ruta de aventura donde hay que buscarse la vida con la
exclusiva ayuda de los pitones según sus autores. En todo el recorrido sólo
encontraremos un clavo al inicio, unos pocos plomos como referencia en L2 y L4,
y algunas chapas en reuniones. Llevar 25 clavos variados y cuerdas de 50 m como
mínimo. Anotar que la salida de la R4 es expuesta.
17- Joc de mans (85 m 7b). Equipada por Ignacio, Xavier, Jaume y Jordi (26-2-89). Escalada
de tres tiradas donde solo destaca un tramo desplomado de Ae en el L3 apurado
posteriormente en 7b. Llevar unas 16 cintas.
18- Kike Ortuño (210 m 6a/A3). 1ª asc.: 26-11-00 por Joan Armengol en solitario. Escalada
de aventura abierta en varios ataques por este carismático escalador de
Terrassa, en tributo a quien fue todo un referente de la escalada dels Ports.
La vía en cuestión, ofrece todo un recital en técnica combinada donde dispondremos
de 12 espits y 17 clavos bien repartidos, para facilitar la progresión o para
forzar grado hasta 6c expo. Llevar 15 pitones para el L3 y L4, pitonisas,
falquitas de madera, fisureros, ganchos y el juego de friends.
19- Makoki (175 m 6b/Ae). 1ª asc.: 12-12-93 por Marcos Díaz “Markitos” y Joan Grau.
Vía abierta íntegramente por abajo y equipada con parabolts que aprovecha el
mejor terreno de este sector, resultando un buffet libre al gusto del
consumidor con un mínimo de 6a/Ae para llegar a los postres. Algún aleje entre
seguros. Anotar que el segundo largo de puede forzar en 7a+. Llevar 15 cintas.
20- Sexo, roca y descontrol (210 m 6a/A2+). 1ª asc.: febrero-90 por Josep María Codina “Husa”, Santi
Juaranz “Witti”, Jesús Martínez y Joaquín Olmo. Terreno de aventura total por
una línea evidente pero con aspecto de pocos amigos, a equipar en su totalidad.
Para tal evento serán útiles unos 25 clavos variados, los fisureros y friends.
Pocas repeticiones.
21- Bambol (230 m 6a/A2+). 1ª asc.: 7-4-85 por Pepe Pinar, Alex Baldillou y Jordi
Muñoz. Ruta de aventura sin expansiones de progresión, que desvela todas las
posibilidades del sector mediante una escalada técnica y obligada, sello
inconfundible de estos aperturistas leridanos apodados con el nombre de
Kafarnaú, malogradamente dos de ellos accidentados en los Alpes en el verano
del 86. Para esta ruta poco equipada serán útiles 3 universales, 2 uves, 4
clavos cortos y los fisureros/aliens. Muy interesante y con pocas repeticiones.
22- Le Bal des Punaises (220 m V+/A2). 1ª asc.: 23-11-93 por Dominique Brau-Mouret, Frederic Chose
y Jérôme Thinieres. Itinerario de aventura forzado entre las vías existentes,
cuyo mérito consiste en pitonar directamente los desplomes para no tocar la vía
Bambol y proseguir por la izquierda de ésta por un terreno mucho más asequible
hasta la cima. Solo encontraremos algunas chapas en reuniones. Llevar de 15 a
20 clavos variados y aliens.
23- Correfoc (250 m 6b/A2). 1ª asc.: 24-11-91 por Jaume Clotet “Paca” y Montse Coll.
Ruta bastante equipada con espits en conjunto, donde destaca una entretenida primera
parte rojiza que termina forzada a expansión hasta el techo del L3, y una
segunda prácticamente en libre mucho más acorde con el terreno gris típico de
la zona, donde podemos apurar a discreción. Ruta dedicada “als Diables” de
Terrassa. Llevar unos 3 clavos, fisureros/aliens y friends.
24- Princesa Stelar (255 m 6b/A4). 1ª asc.: 20-12-87 por Joaquín Olmo y Miguel Ángel Golvano.
Escalada laboriosa hasta alcanzar la R3, con un tramo en desplome graduado de
A4 por su exposición con posibilidad de caída sobre una aparatosa laja. Pasado
todo esto, encontraremos unos pasajes mucho más humanizados equipados con
agarres artificiales que contrastan con todo lo anterior. A pesar de estas
incongruencias, la vía es interesante, exigente y hasta divertida. Llevar 15
clavos variados (algunos cortos), 5 plomos, fisureros y los ganchos. Pocas
repeticiones.
25- Última Alternativa (230 m 7a/A3). 1ª asc.: octubre-94 por Juan Jiménez “Jimy”, Rafel Bernat, Joaquín
Fernandez y Xavi Vallès. Como su nombre insinúa, otra ruta de aventura que se
cuela en la pared cruzando la vía de les Nenes a la altura de la tercera
reunión, para posicionarse y culminar de la mejor forma sin estorbar a los
itinerarios existentes. Con todo ello, cuenta con un laborioso L2 que le otorga
carácter y ambiente al asunto, para luego dar la talla por un muro bien
equipado forzado en 7a. Solo es necesario clavar en los dos primeros largos.
Llevar 10 pitones variados y microfriends. Evitar la época de nidificación.
26- Vía de les Nenes (250 m V+/A2). 1ª asc.: 17-4-83 por Josep María Alsina y Ferrán Prats. Escalada
del todo sorprendente y variada, prácticamente equipada salvo el muro del L3,
donde posiblemente haya que poner algún paso puntual entre chapa y chapa. La
segunda mitad pierde intensidad, pero al final recupera el interés necesario
para salir muy contentos de esta acertada aventura. Dos primeros largos con
parabolts inoxidables. Llevar 4 pitones anchos/cortos y fisureros/aliens. Muy
recomendable.
27- Gemma (220 m 6a/A2+). 1ª asc.: 25-11-90 por Ricardo Asensio, Francesc Suñol y
Francesc Pañella. Itinerario semiequipado en conjunto dónde destacan el L3 y L4
por su punto de ambiente unido a las exigencias de un pitonaje laborioso sin
llegar a extremos. A partir de la R4 todo libre en buena roca, equipado por
arriba con espits. Llevar 15 clavos variados, alguna pitonisa, ganchos y
fisureros/aliens. Pocas repeticiones.
28- STAE (250 m 6a/A2). 1ª asc.: 13-11-83 por Eric Promio, Carles Bausà y Armando
Cobo. Se trata de la alternativa más asequible del sector central de la pared,
cuyo atractivo trazado ofrece toda la gama de pasajes incluido un techo por
donde más tira el asunto. Solo hay que clavar en L2 y L3, y en el resto
proteger algún paso puntual. Llevar 4 pitones (un universal y 3 uves),
fisureros y un friend nº3. De la R4
hacia arriba es fácil y rápida. Muy recomendable.
29- De l’eau dans le gazz (225 m V+/A3). 1ª asc.: 7-11-93 por Dominique Brau-Mouret, Pascal Aruta y
el soporte de Rémi Thivel. Itinerario de corte artificial con solo 2 espits de progresión en el L2 y
otro para pendular en el L3, que ofrece todos los alicientes para curtir la
técnica de mano de unos expertos en el tema. Destaca el L1 como el más expuesto
dada la posible caída al suelo. Para próximas repeticiones serán necesarios de
20 a 25 pitones variados, pitonisas, 5/6 plomos y los ganchos. Pocas
repeticiones.
30- Du mou dans les amares (235 m V+/A3). 1ª asc.: 21-4-94 por Dominique Brau-Mouret y Jean Avril.
Otra demostración del dominio de la técnica efectuada en el sector clave de la
historia, en cuyo desenlace solo encontraremos 4 chapas de progresión y las
tres primeras reuniones montadas. Atención a los dos primeros largos porque son
bastante explosivos, la roca está bastante deteriorada y predominan los plomos.
Llevar unos 25 clavos variados, 10 plomos y los ganchos. Para fanáticos en la
materia. Pocas repeticiones.
31- Desequilibrio Mental (250 m 6a/A3+). 1ª asc.: 1-11-83 por Jean Ch. Peña, Toni Saelices, Joaquín
Olmo, Jesús Martínez y Bartolo Pérez. Abierta simultáneamente por arriba y
desde el suelo, esta ruta marcó el inicio del artificial extremo en la Roca
dels Arcs. Mientras que un primer largo de microfisura a equipar es el precio
de la entrada para seguir adelante y desahogarse columpiándose en el vacío del
desplome, una segunda parte totalmente equipada ofrece la otra versión de la
ruta. En definitiva, todo un referente de la época en la que hay que dominar
todos los temas y disponer de unos 15 clavos, pitones cortos, plomos y
microfisureros. Roca buena pero muy deteriorada a causa del pitonaje.
32- Entrada en la 4ª dimensión (235 m 6a/A4). 1ª asc.: 30-12-94 por los hnos. Dominique y Alexandre
Brau-Mouret con la colaboración de Cyril Dupouy. La última propuesta abierta
por los franceses y la más extrema de su intensa trayectoria por la Roca dels
Arcs. Claramente destacan los tres primeros largos por su cruda realidad, con
respecto al resto del itinerario mucho más humano. Vía abierta sin expansiones
de progresión, pese a que se aprovecha de una chapa del siguiente itinerario
para aminorar el factor 2 a la salida de la R2. Llevar de 25 a 30 clavos, 20
plomos y los ganchos. Pocas repeticiones.
33- Bailando con plomos (230 m 6a/A4+). 1ª asc.: 6-12-93 por Jaume Clotet “Paca”. Dada la clara
insistencia del personal por abrir “el no da más” en este particular sector de
la pared, no le queda más remedio a este bragado escalador de Terrassa que anotarse
una primera en la diana principal, a ritmo de plomos para dar más morbo al
asunto. Llevar 25 clavos, 2 ganchos de punta, pitonisas, friends y plomos
(durante la apertura de utilizaron unos 65, pero se recomiendan unos 25 más
para triunfar correctamente). Pocas repeticiones.
34- Deseos de placer (220 m 6a/A5). 1ª asc.: 11-12-89 por Joaquín Olmo y Jesús Martínez. Ruta
combinada donde el desplome inicial exige una buena dosis de sangre fría con
nefasta caída sobre el suelo. A partir de aquí la cosa se suaviza sin regalar
nada, y aparecen cuatro laboriosos largos hasta alcanzar el típico terreno gris
donde progresar en libre desequipado. Itinerario con muy pocas ascensiones aunque
el L1 se ha repetido en varias ocasiones para solventar el misterio. Llevar 25
pitones variados, 15 plomos, micropitones, cuñas de madera, juego de aliens y
los ganchos.
35- Black Sabbath (255 m 6b/A2). 1ª asc.: 12-9-82 por Carles Fortea, Manel Sugranyes, Oriol
Pié, Rafa Alacuart, Evarist Valera y Ritchie Pelegrina. Itinerario atractivo y
variado sin llegar a extremos, dado que fue el primero en atacar este plomado
sector escogiendo la línea más evidente aunque a partir de la R4 fue montado
desde arriba. Por consiguiente tenemos tres tiradas combinadas a equipar algún
paso puntual, y el resto en plan deportivo por muros de calidad. Llevar 3
clavos, alguna chapa recuperable y fisureros/aliens. Muy recomendable.
36- Heidi (250 m 6a/A4+). 1ª asc.: 15-6-94 por Miquel Puigdomènech en 4 jornadas con
un vivac en pared. Acreditada escalada por su dificultad técnica y exposición,
cuya entrada da una ligera idea de que va el asunto. Encontraremos sólo 6
espits de protección en los largos en libre y unos pocos plomos de referencia
en los tramos claves de artificial. Las dos últimas reuniones hay que
reforzarlas con pitones. Llevar 25 clavos variados, algún bong, pitonisas,
micropitones, plomos, ganchos y friends. Pocas repeticiones.
37- Aigua de Kentucky (200 m 6a/A4). 1ª asc.: diciembre 2011 por Àngel Vedo, Yuri Varas, Ramón
Bartra y Nacho Florenciano. Moderno itinerario sin expansiones de progresión
cuya apertura representó 7 días de esfuerzo fijando cuerdas. Encajado entre las
vías existentes, ofrece unos primeros largos especialmente técnicos (máximo A4),
y tras cruzar la vía Wild Planet consigue de una forma elegante y directa
llegar a la feixa cimera (máximo 6a). Llevar un buen surtido de clavos de todo
tipo, 20 plomos, ganchos, aliens y camalots. Reuniones montadas con parabolts.
38- El Rumor de Céfiro (240 m V+/A3). 1ª asc.: 30-4-89 por
Ricardo Asensio, Javier Ayuso y Francesc Pañella. Interesante ruta combinada a
equipar que resigue la línea más elegante después de la Wild Planet, cruzando
ésta y aprovechando una marcada fisura exterior como reclamo principal de la
parte final. Cuenta con varios tramos de artificial laboriosos, donde serán
necesarios unos 20 clavos variados, 6 plomos, pitonisas, ganchos y
fisureros/aliens.
39- Sambari Nai (230 m 6b/A3+). 1ª asc.: 1-12-00 por Víctor Sans “Salla”. Una buena
muestra del interés por el género artificial por parte de este versátil
escalador leridano, que dedica esta vía al malogrado Kike Ortuño fallecido
accidentalmente mientras practicaba escalada esportiva. El itinerario en
cuestión cuenta con un L1 destacable, algunos espits de progresión, y la
ventaja de una roca muy buena en todo el recorrido. Llevar unos 30 pitones de
todo tipo, 25 plomos, ganchos, 6 chapas recuperables, fisureros, aliens
(semáforo) y el juego de camalots hasta nº2.
40- Fase Terminal (225 m 7b). 1ª asc.: 2-7-89 por Julio Solera, Ramón Artigas y Josep
Escofet. Itinerario abierto por abajo y equipado deportivamente (espits),
resultando uno de los más atrevidos y extremos en libre de toda la pared.
Continuidad y ambiente garantizado hasta alcanzar los tres últimos largos donde
disminuye la verticalidad sin perder interés. Llevar unas 15 cintas.
41- Wild Planet (260 m 6a/A1). 1ª asc.: 6-12-81 por Pep Masip “Nifo” y Pep Boixadós
“Rosso”. Su perfil indiscutible le otorga el privilegio de ser una de las
grandes clásicas del Montsec. Escalada del todo variada con solo una tirada
remarcable de artificial equipada (L2) y un tercer largo en aérea travesía que
resulta lo más inolvidable y fotogénico del itinerario. Pasos claves pulidos y
una dificultad máxima obligada de 6a. Reequipada con parabolts y liberada en
7c+ (L2) y 7ª (L3). Llevar cintas largas, fisureros y juego de aliens repitiendo
el verde. Imprescindible.
42- Temple dels Monos (220 m 6a+/A3+). 1ª asc.: 14-11-93 por Pere Campanera y Marcel Miró.
Interesante itinerario de artificial técnico con cuatro largos por montar, con tan
sólo 4 espits de progresión hasta R4 y el resto en libre equipado con parabolts,
que representa una opción muy válida para percatarse del asunto sin entorpecer
otras rutas. Llevar un buen surtido de clavos, 10 plomos, pitonisas y los
ganchos.
43- Marco Polo (250 m V+/A1). 1ª
asc.: 4-1-85 por Antonio García Picazo y Armand Ballart. Hasta la R3 aprovecha
una antigua línea de buriles, y una vez superado el característico techo, el
rastro desaparece totalmente hasta el penúltimo largo donde volvemos a
encontrar algunas chapas de alguien que pretendía terminar el proyecto desde
arriba. Pese a todo va acertando las debilidades de un excelente terreno,
ofreciendo una escalada entretenida y variada a proteger convenientemente en
sus tiradas centrales. Serán útiles unos 10 clavos y un juego de
fisureros/aliens. Recomendable por su aventura.
44- Vía del Quatre (250 m 6b/A0).
1ª asc.: 20-4-80 por S. Puig y J.M.Guillaumet. Escalada muy sinuosa y elegante,
fruto de la astucia de la época para no burilar y aprovechar lo más elocuente
para llegar a la cima. Pese a estar rodeada de itinerarios, el trazado se
adivina perfectamente observando los clavaderos usados y el ligero pulido de la
roca. Los dos primeros largos con parabolts y el resto con algunos pitones como
referencia. Llevar cintas largas, chapas recuperables y fisureros/aliens. Muy
recomendable aunque algo expo según la tónica general.
45- La Chica del Martini (210 m
7b+). Equipada por Carles Fortea, Rafa Alacuart y Jordi Salvador (9-6-86). De
las vías deportivas más acertadas exceptuando un L2 muy forzado y donde reside
la mayor dificultad (originalmente Ae). Los muros centrales, pese a su pulido,
son toda una delicia por su calidad y variedad de agarres que rompen la
monotonía de las grietas horizontales. Reequipada con parabolts. Llevar 16
cintas. Muy recomendable.
46- El Señor de los Bordillos (200
m 7a). Equipada por Josep Bagué, Ramón Durán, Pep Artigas, Pep Viñals y “Pekas”
(15-11-87). Posiblemente el trazado más deportivo como tal, sin tregua para los
brazos y continuidad garantizada hasta la feixa de salida. Terreno muy pulido en
general, pero bien asegurado en todo momento (espits y parabolts). El segundo
largo sin ser obligado no regala nada. Llevar 14 cintas. Dura pero
recomendable.
47- Musical Exprés (200m 6b+).
Equipada por Albert Merino, Ernesto López, Toni García, Néstor Bohigas, Joaquín
Olmo y Armand Ballart (18-12-82). Gran clásica de la Roca dels Arcs y una de
las primeras vías equipadas de la zona bajando desde lo alto. En solo una
jornada quedó prácticamente diseñado el proyecto, ensayando los largos y
colocando los buriles a mano. En conjunto acierta una línea bastante asequible
en cuestión, exceptuando un L2 donde hay que dar la talla y no patinar en el
intento. Reequipada con parabolts. Llevar 10 cintas y el semáforo de aliens si
vamos muy apurados. Terreno muy pulido en general.
48- El Placer del Gesto (200 m 6b).
1ª asc.: 29-1-89 por Xavi Cullell y Armand Ballart. Esta ruta de abrió colocando
por abajo los mínimos espits, como protesta a la tendencia general a equipar
desmesuradamente las vías descolgándose por arriba. De esta manera con sólo 4
cintas de sube por la Roca dels Arcs, cuando en la mayoría de las vías
equipadas se utilizan unas 15 de promedio. Gracias a ello, actualmente es la
ruta menos pulida del repertorio y una buena escusa para sacar los aliens de
paseo. Anotar que a la derecha existe un impertinente trazado sin más
referencias (vía Divina y fabulosa), cuyos parabolts quedan al alcance restando
el compromiso a ésta ascensión.
49- La Taca de Romesco (210 m 6c).
Equipada por Pep Forés, Jaume Soler, Joan Solé y Joan A.Borràs (marzo-95). Buen
itinerario recientemente reequipado, que aprovecha el enorme rocódromo que
representa la Roca dels Arcs en su parte más grisácea. Roca de primera y muros
a destajo, con una dificultad máxima obligada de 6b, son los principales
alicientes de esta vía con un nombre tan original. Llevar 10 cintas. Muy
recomendable.
50- Cabaret Galàctic (210 m 6c).
Equipada por Tati Vilar, Jordi Sunyer, Xavi Bonet, Jordi Llobera, y los hnos. Joan
y Toni Llasera (16-12-84). Bonita y variada escalada abierta parcialmente desde
abajo y sobre equipada posteriormente, ofreciendo unos largos muy atractivos y
acertados con cierta similitud al itinerario anterior. Reequipada con parabolts
inoxidables. Llevar 12 cintas más bien largas, Recomendable.
51- Lidia (220 m 6a). 1ª asc.: 19-9-82
por José Mª Peralta en solitario. Aventura concebida desde abajo cuando prácticamente
no existía nada en este sector, por lo que discurre por lo más asequible y
evidente que no siempre es lo más bonito y hermoso en este tipo de pared.
Itinerario sinuoso sobre roca discreta y con un cierto nivel de exposición.
Poco equipada con buriles y algunos clavos. Llevar 5 pitones variados y
fisureros/aliens.
52- Cruel Pasión (200 m 7a).
Equipada por Toni Massana, Joan Cabau y Joan Wenceslao (1-11-82). Fue el primer
itinerario catalogado de 7º grado de Vilanova de Meià, ya que en su arrancada
supera un muro especialmente monolítico que no tiene nada que ver con el resto
de la vía. A partir de la R1 va evitando de la mejor manera el trazado de la
vía Lidia abierta poco antes, aprovechando lo mejor del terreno en ocasiones
algo expo. Llevar 12 cintas.
53- Vides exemplars (110 m V+/A2). 1ª asc.: 28-3-94 por Pilar Caxach y Joan Wenceslao.
Sinuosa aventura sin más referencias, que tras cuatro tiradas desequipadas
enlaza con la vía anterior aprovechando el hueco disponible de la pared. Sólo
encontraremos montadas las reuniones y un clavo en el L1. Llevar 10 pitones
variados, fisureros, aliens y juego de friends. Especial coleccionistas.
54- Anaconda (200 m 6c+). 1ª asc.:
7-3-81 por Felip Sandiumenge, Josep Lluís Moreno y Pep Masip. Pese que
actualmente ha quedado un tanto desfigurada por la proliferación de vías a su
alrededor, esta bonita escalada ofrece unas tiradas únicas que no se pueden despreciar.
Si la fisura de entrada por si sola ya merece la visita, el resto resuelve la
jugada mediante una diagonal ascendente muy acertada que lleva al saliente más
acentuado para coronar lo más asequible. Máximo obligado: 6a. Llevar
fisureros/aliens y un par de chapas.
55- El Barón Rampante (210 m 7a+).
1ª asc.: 21-11-90 por Juani Espuny y Luis Alfonso. Abierta en escalada
combinada y forzada posteriormente en libre, supera directamente los acusados
desplomes de este sector de la pared con buena roca salvo la primera mitad del
L1. Itinerario equipado con parabolts en el que serán necesarias 16 cintas y un
friend del 3.
56- Flor de Luna (230 m 6b/A2). 1ª
asc.: 18-9-88 por Francesc Pañella, Enric Camacho, Xavi Cullell y Luis Alfonso.
Escalada todo-terreno con los tramos de artificial por montar y el libre
equipado. Coincide inevitablemente en la parte central con la vía Anaconda,
para salir por la izquierda de ésta a la caza de los arrogantes muros grises
finales. Llevar 6 pitones, 2 pitonisas, 2 plomos, ganchos y fisureros/aliens.
57- Paula-Tarragó (205 m 7b+). 1º
asc.: enero del 2012 por Paula Revoil y David Tarragó. Itinerario totalmente
equipado con parabolts inoxidables que encaja en uno de los sectores más saturados
de la pared. Ofrece hasta el momento, los tramos más extremos en libre de la
Roca dels Arcs con tres largos de 7º, todo sobre roca excelente salvo la
primera tirada. Llevar 15 cintas. Nombre y punto verde al pie de vía.
58- Joan Freixenet (230 m Vº/A1+).
1ª asc.: 25-10-81 por José Godoy, Jordi Muñoz y Alex Martínez. Un bonito
trazado que difiere totalmente del resto por sus sorprendentes pasajes bajo los
techos más consistentes que otorga la pared. Se accede fácilmente a la R1 desde
la vía Tàrrega, pero vale la pena escalar el L1 original sin clavar, intentando
pasarlo con los friends. Vía semiequipada con buriles, llevar unos 5 clavos
(básicamente uves), fisureros, aliens, friends medianos y cintas muy largas
para evitar el rozamiento. Muy recomendable.
59- Postre de sostre (170 m
Vº/A3+). 1ª asc.: 11-4-94 por Jaume Clotet “Paca” en solitario. Si la vía
anterior sorteaba los techos de lado ésta los remata de frente con toda la
estrategia necesaria para evitar al máximo las expansiones. En consecuencia
aparece un primer techo semifisurado que ofrece unos 15 pasos, y un segundo
mucho más corto pero más intenso. Una colgada alternativa en la que serán de
gran utilidad unos 20 clavos y algún plomo.
60- Rosa del Sur (200 m 6a/Ae). 1ª asc.: Pedro Jiménez, Irene Grau y Juan Carlos Rosas
(2011). Itinerario abierto en tres ataques y liberado posteriormente por Manel
Grau y Pedro Jiménez (L4: 6c+), en el
que dispondremos de 23 parabolts y algún clavo (llevar el juego de aliens),
para sortear el margen derecho de los techos característicos. Máximo obligado:
6a.
61- Tàrrega (170 m Vº). 1ª asc.:
R.Balcells y R.Reynal (1974). La ruta pionera de toda la zona de Vilanova de
Meià, cuya aventura justifica el camino más evidente para alcanzar la cresta
cimera sin mayores pretensiones. A todo ello, representa un itinerario idóneo para
la iniciación por el hecho de poseer los seguros más naturales y no estar
cosido de chapas. De todas formas hay que adivinar el trazado y protegerlo
convenientemente según el nivel de cada uno. Para ello serán útiles las cintas
largas y los fisureros/aliens. Recomendable.
62- Buenas vibraciones (155 m V+).
1ª asc.: Gustavo Mañez “Kush” y Alicia Devesa (11-92). Tres largos poco
equipados conducen de forma directa por un terreno más tortuoso que la lógica
de la vía Tàrrega sortea desde un buen principio. En todo el recorrido hallaremos
unas pocas chapas como referencia. Llevar fisureros, aliens y friends medianos.
63- Bukanan (170 m IV+). 1ª asc.:
18-9-83 por Joan Asín, Xavier Samsó y A.Perís. Una alternativa más a la vía Tàrrega
siguiendo por un terreno más sugestivo a primera vista pero de menor calidad en
general. Semiequipada con buriles y algunos pitones. Llevar fisureros y cintas
largas. Poco recomendable según la opinión general.
64- Pastelina (200 m 6a). 1ª asc.:
25-2-82 por Eric Promio y Joan Asín. Ruta interesante de entrada pero que a
partir de la R3 cambia la tónica al perder atractivo irremediablemente. De
todas formas la roca es muy buena e idónea para la protección con microfriens
(aliens), lo que la hace muy interesante para aprender el oficio. Poco equipada
con algún clavo y algún buril muy disperso.
65- Maria Puig (200 m 6a). 1ª asc.:
2-3-08 por Armand Ballart en solitario. Itinerario poco equipado en cuestión,
abierto en memoria a la que fue una de las escaladoras catalanas más
representativas de la década de los 50, hija de estas tierras del Montsec y
compañera infatigable de Ernest Lamarca. La vía es de similares características
a la anterior y para su protección serán de utilidad un par de clavos
universales, fisureros, aliens y camalot nº1.
66- Airgamboys (200 m 6a/Ae). 1ª asc.: 4-11-01 por Joan Armengol. Itinerario discreto
pero bien abierto con las dificultades concentradas en los dos primeros largos.
Bastante equipada en general (pitones y espits), pero con algunas protecciones
precarias. Roca muy buena destacando el bonito flanqueo para llegar a la R1.
Llevar los aliens, friends medianos para reforzar y 14 cintas (algunas muy
largas).
67- Tom Sawyer (165 m 6a/A2). 1ª
asc.: 13-12-92 por Jaume Clotet “Paca” en solitario. Salvo la primera tirada
abierta en A2 y apurada posteriormente en 6c, el resto de la vía aprovecha los
típicos muros de este sector más asequible, sorteando de la mejor forma la
vegetación. Semiequipada con espits y clavos. Llevar unas 10 cintas.
68- Corazones solitarios (60 m Vº).
1ª asc.: 2-12-84 por Óscar Salas, Josep María Porta y Carles Loré. Se trata de
una variante directa de la vía Navarro con algo más de dificultad en la
encontraremos algunos buriles y clavos. Llevar los fisureros y aliens.
69- Navarro (180 m Vº). 1ª asc.:
20-4-80 por Pep Masip “Nifo” y Felip Sandiumenge. Sin duda alguna la mejor
opción para degustar la extraordinaria formación rocosa de la pared, mediante
unas tiradas afables acordes con la calidad y moderada dificultad de un
itinerario clásico por excelencia. Semiequipada con alguna chapa y clavos.
Llevar fisureros/aliens y cintas largas. Muy recomendable como primer contacto
con la pared.
70- Vía del Sostre frustrat (150 m
Vº). 1ª asc.: julio-82 por R.Llanés y J.Llanés. Itinerario parecido al anterior
pero por un terreno de calidad más discreta, donde el objetivo en forma de
techo se sorteó por la izquierda dadas las circunstancias. En todo el recorrido
solo encontraremos 3 buriles en el segundo largo. Llevar 4 clavos, fisureros y
aliens.
71- Supershangoo (140 m V+). 1ª asc.: 21-4-96 por Jordi Florensa y Dani Brugarolas. Vía sin
expansión que tras aprovechar la R1 de la vía SAME discurre a la izquierda para
salvar directamente los muros de la forma más limpia y elegante sin dejar
rastro. En total cuatro largos con un grado máximo de V+ en la tercera tirada,
con roca aceptable en conjunto y aventura asegurada en todos los casos. Para
próximas repeticiones serán útiles 5 clavos y fisureros/aliens.
72- Vía SAME (140 m 6a). 1ª asc.:
16-6-84 por Emilio Ortega y Aleix Salas. Un arrogante muro de dos tiradas
conduce al único paso evidente entre los desplomes terminando por lo más
practicable. Itinerario poco repetido pero de interés indudable y roca de
calidad. Poco equipada con buriles por lo que algún tramo puede resultar algo
expo. Llevar los fisureros y aliens para apañar la situación.
73- Dansa de Gris (120 m 6a). 1ª
asc.: febrero-84 por R.Llanés y J.Llanés. Este itinerario acertó las
debilidades de este tramo de pared, pero eclipsado claramente por las populares
vías equipadas del sector de la Necronomicón. No obstante la vía no tiene
desperdicio, solo hay que confiar de los pocos buriles existentes y reforzar la
jugada convenientemente. Roca muy buena en general pese a su misterioso aspecto.
Llevar fisureros/aliens.
74- Passatge a l’Eden (80 m 7a). Equipada por Carles Loré y Jordi Sunyer (19-2-89). Dos potentes
largos equipados con espits a partir de la R1 de la Dansa de Gris, son la
principal escusa para amortizar el terreno más peliagudo que ofrece este monolítico
sector, con un paso morfológico en el L2. Sigue la línea de rápeles instalados
en esta parte de la Roca dels Arcs. 6b+ obligado. Llevar 9 cintas.
75- Camel (155 m V+). Equipada por Robert Montaner y Josep Torrents (8-1-82).
Escalada clásica del sector por su asequible dificultad y una gran variedad de
pasajes, siempre sobre terreno excelente aunque pulido en general. Destaca la
travesía del tercer largo y la salida de la R3 como lo más sorprendente y
difícil con diferencia (rozando el 6a). Reequipada con parabolts. Llevar 8
cintas y fisureros/aliens.
76- Slowhand (90 m 6b+). Equipada por Santi Chacón y Carles Loré (7-4-90). Viene a ser
la versión deportiva de la Camel con un exigente L3 de continuidad, que destaca
claramente del resto del itinerario y pone a prueba los antebrazos. Asegurada
con espits. 6a+ obligado. Llevar 10 cintas.
77- Sol rogent (150 m 6a). Equipada por Emilio Ortega y Jordi Pallás (16-4-83). Otra
clara alternativa a la vía Camel escalando por encima de la gran laja y
superando directamente el desplome dominante. Asegurada con buriles y espits.
El primer seguro queda bastante alto. V+ obligado. Llevar 7 cintas.
78- A dónde vas Vicente (150 m 6a). Equipada por Albert Campo y Emilio Ortega (4-6-89). Dado el
éxito de la Necronomicón quedaba claro que por su derecha salía una vía tan o
más bonita aunque un pelo más exigente. Esta ruta pronto tomó el relevo a la
anfitriona, y en poco tiempo de puso a su altura como se aprecia en el pulido de
sus agarres. 6a obligado. Reequipada con parabolts. 6a obligado. Llevar 7
cintas.
79- Necronomicón (140 m 6a). Equipada por Aleix Salas y Nico García (8-11-81). Quizás sea el
itinerario más repetido de la Roca dels Arcs, tanto por su belleza, asequible
dificultad y proximidad al vehículo. En consecuencia está considerablemente
pulido y en el largo clave (L3) derrocharemos mucha más energía que antaño por
lo que el grado a aumentado. Con los años muchos trazados serán víctimas de
este fenómeno si no aparece una solución. Reequipado con parabolts. Llevar 8
cintas y friends pequeños si vamos muy apurados.
80- Cabra Blanca (150 m 6a). Equipada por Albert Gómez, Remi Brescó y Jaume Real (14-10-84).
La única vía del sello “Barrufets” curiosamente concebida en plan moderno en
este extremo de la Roca dels Arcs. Amortiza un terreno más rebuscado pese a que
la roca sigue siendo de buena calidad salvo el último largo. Seguros alejados
(buriles). Llevar 6 cintas.
81- Teni (135 m 6a+). 1ª asc.: 17-6-90 por Quim Nadal, Joan Cano y Ferrán Gel. La versión más moderna de la vía anterior, abierta y equipada con espits por abajo, en la que destacan el L1 y el típico muro del L3 como lo más exigente. En general, la discontinuidad del terreno no acompaña. Posible bajar desde la R4 mediante dos rápeles de 55 m. Llevar 11 cintas y un friend mediano.